La CHJ afronta la alerta roja en Valencia con fallos en seis medidores de caudales

El Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) no aporta este lunes información, cada cinco minutos, de seis puntos de control de su red, según se indica en su página web.

Tres medidores de caudal del organismo de cuenca dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica aparecen en el mapa con una cruz que advierte de un «error de medición» que evidencia que «está en fallo». Se trata del instalado en el azud de Font d'en Carrós, en Villalonga; el que controla el caudal del río Júcar a su paso por el municipio de El Picazo (Cuenca); y el del río Mirón en Casas de Lázaro (Albacete).

Por otra parte, tampoco reportan datos los sensores de Aguas Potables (río Turia) en Manises; Requena (río Magro); y Los Frailes (río Júcar) en Valdeganga (Albacete). En estos tres casos, el punto de control «no está transmitiendo datos por motivos técnicos o de comunicaciones», algunos incluso desde hace meses.

En paralelo, el Sistema de Alerta Temprana (SAT) prometido tras la catastrófica dana del 29 de octubre sigue sin estar operativo. Su implantación en toda la demarcación del Júcar «permitirá, en combinación con otros sistemas, realizar predicciones hidrológicas y anticiparse a los episodios de avenidas e inundaciones, mejorando la capacidad y reduciendo los tiempos de reacción durante el desarrollo de episodios de emergencia». Así se detalla en los pliegos de licitación publicados el 10 de septiembre en la Plataforma de Contratación del Sector Público.

Aunque la entonces ministra Teresa Ribera anunció su adjudicación en noviembre con un plazo de ejecución de seis meses, «la complejidad de estos sistemas en la cuenca mediterránea» impedía que se cumpliera ese término. «Ante la imposibilidad de finalizarlo en el plazo de ejecución previsto para ajustarse al plazo de cumplimiento de hitos y objetivos establecido en el PRTR -plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (fondos europeos)-, se decidió su financiación con el presupuesto ordinario de la Dirección General del Agua del MITERD», explicaba la Confederación en un informe remitido a la comisión de investigación sobre la dana en las Cortes Valencianas.

El contrato, con un presupuesto estimado de 1,7 millones de euros, tendrá un plazo de ejecución de 36 meses. Las inversiones, en cualquier caso, no llegarían hasta 2026. No obstante, aprovechando las obras de emergencias para paliar los «importantes daños» sufridos en las estaciones del SAIH en la trágica barrancada, «se incluyó una primera implantación de un sistema de alerta temprana en las áreas más afectadas por la DANA, lo que podría facilitar la emisión de avisos hidrológicos». «Esta actuación se está implantando en el barranco del Poyo, el Río Magro y la cuenca vertiente al embalse de Buseo», informaba la CHJ a la comisión parlamentaria.