Dirigentes e históricos del PSOE ensalzan la figura de Carmen Alborch en la lucha feminista

Así, por ejemplo, el presidente de la Generalitat Valenciana, el socialista Ximo Puig , ha mostrado su "tristeza" por el fallecimiento de su compañera, que deja su "alegría, creatividad y feminismo". "Carmen, patrimonio de la humanidad", ha indicado en su cuenta de Twitter.

Puig, quien entregó precisamente el 9 d'Octubre la Alta Distinción de la Generalitat a la exministra, ha hecho un guiño así a la reivindicación que Alborch hizo del feminismo, al decir que debería ser declarado Patrimonio de la Humanidad".

"Siento una gran tristeza por la ausencia de Carmen. Pocas personas son tantas miradas positivas a la vez. Nos deja el testimonio de su alegría en el combate de las ideas que hacen avanzar el mundo. Nos deja la creatividad y el feminismo. Carmen, Patrimonio de la Humanidad", ha escrito.

Seguidamente, en el mensaje de condolencias que ha pronunciado desde el Palau de la Generalitat, Puig ha ahondado en que "Carmen Alborch fue una referencia para el progreso, para la modernidad y para la cultura", y ha subrayado que su discurso feminista ha supuesto "un mensaje de esperanza y de lucha para todas las mujeres"

"Fue una referencia para el progreso, para la modernidad, para la cultura y para la política, para la buena política", ha enfatizado desde el Salón de Cortes del Palau, donde la también exdirectora general de Cultura de la Generalitat y exdirectora del Institut Valencià d'Art Modern (IVAM) recibió la Alta Distinción de la Generalitat.

Puig ha recordado las palabras que pronunció en esa misma sala la profesora, escritora, política y referente feminista para varias generaciones tras recibir el máximo reconocimiento que otorga la Generalitat: "Ella siempre decía que el feminismo debía ser declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad".

Su discurso supone así "un mensaje de esperanza y de lucha para todas las mujeres que ella ha llevado siempre arraigado en su forma de entender la vida", ha manifestado el 'president'.

Por todo ello, ha lamentado que este es "un día de tristeza, pero también es un día para testimoniar que tenemos un futuro a compartir desde los principios que practicaba Carmen Alborch", principios de "igualdad fraternidad y cultura".

"Carmen nunca va a ser olvidada porque sus principios van a estar presentes siempre en la lucha decidida que ella nos enseñó con su ejemplo", ha aseverado Puig, para remachar que la valenciana "luchó por la igualdad y por las ideas que hacen avanzar al mundo".

Por su parte, el expresident de la Generalitat Joan Lerma ha asegurado que "lo más importante" que deja la ex ministra Carmen Alborch son "las ganas de luchar por los derechos de las mujeres, por la igualdad, y por dar acceso a todo el mundo a la cultura y a las mismas posibilidades de desarrollar una vida personal".

A su llegada al Tanatorio Municipal de Valencia, Lerma ha afirmado que el fallecimiento de Alborch es "un golpe muy duro" y que hoy es un día "muy triste", pues aunque "por desgracia" llevaban "mucho tiempo" esperando un desenlace como este, "nunca te haces a la idea de que va a pasar".

A su juicio, la marcha de Alborch es también "un golpe" para los ciudadanos que la conocían y "sabían de sus valores, de lucha, de su amabilidad en el trato y de la preocupación que tenía no solo por los temas culturales, por los que era conocida inicialmente, sino sobre todo por la lucha por los derechos de las mujeres, que le ocupaba una buena parte de su vida".

Alborch "dio un impulso decisivo y empoderó a las mujeres para luchar por sus derechos, y las hizo sentirse bien con ese planteamiento", ha destacado el senador socialista, para quien este es el principal legado que deja la política valenciana.

Lerma ha afirmado que Alborch deja "muchos amigos" y sobre todo deja "a valentía"de luchar por las cosas en las que se cree, al tiempo que ha indicado que dio un " impulso decisivo a la modernidad de esta Comunidad y de España ".

El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell , ha asegurado que la que fue su compañera de partido y de Ejecutivo, Carmen Alborch, era " una persona llena de vitalidad, de ánimo, sonriente, optimista, trabajadora y una buena compañera ".

Borrell, a su llegada a un acto de la Fundación Ramón Areces en Madrid, ha señalado a los periodistas que sabía que Alborch estaba enferma pero "no tenía ni idea" de que se pudiera producir un desenlace tan rápido.

El ministro ha recordado que fue ministra de Cultura -de 1993 a 1996- en el Ejecutivo en el que él fue ministro de Obras Públicas y Transportes y que luego coincidieron en el Parlamento.