El independentismo ve en el anuncio del Gobierno una «cortina de humo» para no investigar

«Cortina de humo», «maniobra para pasar de verdugos a víctimas», «coartada» para no investigar, son algunas de las expresiones usadas por los líderes de los partidos y asociaciones secesionistas, que ven como un caso que les servía para retomar el pulso e internacionalizar su causa tras años de tono bajo y desorientación estratégica, coge una mayor dimensión y difumina su calculada estrategia .

Si la pandemia de Covid y la guerra de Ucrania ya fueron de alguna forma un severo baño de realidad para el independentismo -las encuestas y el sentir ciudadano indican que la sociedad catalana está cada vez más preocupado por los problemas reales que por un quimérico y ya casi enterrado ‘procés- , el caso Pegasus servía para recuperar la iniciativa.

Ahora, cuando la polémica no solo les afecta a ellos, el independentismo ya no puede cabalgar Pegasus en solitario. Peticiones concretas como la de la dimisión de la ministra Margarita Robles cogen un extraño giro cuando la titular de Defensa pasa de ser ejecutora o encubridora del presunto espionaje -según la tesis del independentismo- a víctima del mismo.

Es en este contexto que internamente tanto en ERC como en Junts y la CUP se tiene el convencimiento de que el momento elegido por el Gobierno para comunicar que Pedro Sánchez y la citada Robles también fueron espiados no es casual . De hecho, se cree que el caso va a ser utilizado precisamente como «coartada» para no dar explicaciones -según palabras del presidente de ERC, Oriol Junqueras- sobre lo que hasta ahora se conocía como 'catalan gate'.

Junqueras, este mediodía en rueda de prensa, ha señalado que «las preguntas que desde Esquerra hemos hecho en las últimas semanas continúan sin respuesta». «Al margen de todo lo que hoy se ha anunciado, seguimos pidiendo al gobierno español respuestas », ha añadido. «Si cuando nosotros les pedimos información sobre el espionaje de unos sesenta personas responden que no pueden contestar; ¿por qué cuando dicen que les espían a ellos no tienen inconveniente en anunciarlo y llevarlo a la justicia?», se ha preguntado.

Para Junqueras, en una tesis que ya es abrumadora en las redes sociales independentistas, la credibilidad del Gobierno en este caso es nula. «En pocos días se ha pasado de negar el espionaje, a decir que lo merecíamos, a anunciar que les han espiado. Este relato que permanenmente están construyendo, ¿qué credibilidad puede tener?», ha insistido el líder de ERC, que ha recordado que es el Estado el que dispone de los instrumentos para espiar .

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, también se ha referido al caso desde Twitter y ha asegurado que «la doble vara de medir es evidente. Contra el independentismo todo vale ». Además, ha sostenido que cualquier espionaje político es de extrema gravedad y que los independentistas están avisando sobre el asunto desde hace días «sin obtener explicaciones» del Gobierno.

En la misma línea, el fugado Carles Puigdemont, ha mostrado su solidaridad con Sánchez y Robles al mismo tiempo que les reprochaba su inacción. «La violación de la intimidad de Sánchez y Robles es un crimen gravísimo que amenaza la democracia. Mi solidaridad hacia ellos, como víctimas, y mi máxima exigencia hacia ellos, como responsables de no haber hecho nada hasta el estallido del 'catalangate'», ha asegurado desde su cuenta de Twitter el expresidente catalán. «Cuando lo denunciamos los catalanes no merecíamos tanta consideración», ha añadido.

Más contundente se ha mostrado la presidenta del Parlamento catalán, Laura Borràs, que ha insinuado que el anuncio de esta mañana es una maniobra para pasar de «verdugos a víctimas». «Sánchez y Robles dicen ser espiados. Ahora sí que es un tema muy grave, cuando sólo afectaba al independentismo, la ministra lo justificaba. ¿Es la evidencia de que no es necesario limpiar las cloacas por si las puedes usar? ¿O una maniobra para pasar de verdugos a víctimas? ¿Bye CatalanGate? No cuela», ha apuntado Borràs en las redes sociales.

Por su parte, la secretaria general de ERC, Marta Rovira, también ha reaccionado al anuncio del Gobierno en otro tuit: «Moncloa dice que Moncloa ha sido espiada por la Moncloa con Pegasus que tiene la Moncloa. Ahora, las responsabilidades políticas no las tomará Moncloa».

También se ha referido a ello en un mensaje en Twitter el secretario general de Junts, Jordi Sànchez, que ha asegurado que el hecho de que el teléfono de Sánchez haya sido espiado «no resta ningún motivo para seguir pensando que la s cloacas del Estado español están detrás del CatalanGate». «En todo caso hoy queda certificado el espionaje contra el independentismo. Más que nunca comisión independiente de investigación«, ha reclamado Sánchez.

Desde la CUP también han sido críticos con la cuestión y han aprovechado para arremetar contra el Gobierno. "¿ Cortina de humo para convertir vedugos en víctimas? ¿Desviar la atención hacia el extranjero? ¿o bien el propio CNI espiando 'por la unidad de España'?", se ha preguntado el diputado 'cupaire' Albert Botran, que ha exigido de nuevo una comisión de investigación urgente para aclarar el supuesto espionaje.