La mitad de los empresarios apuesta por la nuclear frente al problema energético
Una encuesta de las Cámaras revela que uno de cada diez apoyaría la vuelta al carbón
El presidente de las Cámaras de Comercio de Castilla y León, Antonio Miguel Méndez Pozo, presenta los resultados de la encuesta
El 97% de los empresarios de Castilla y León consideran grave el problema de la dependencia energética en España y aunque más de la mitad (52 por ciento) plantea como solución acelerar la implantación de energías renovables, el 45% apuesta por ampliar la vida ... útil e incluso instalar más plantas nucleares y el 10% pide la vuelta de las centrales de carbón.
Son parte de los datos que se deducen de una encuesta realizada por Sigma Dos para las Cámaras de Comercio, con el fin de conocer el clima empresarial de España, para lo que se realizaron 2.164 encuestas, 300 de ellas en Castilla y León.
Con bastante retraso frente a los resultados nacionales presentados en septiembre, el presidente del Consejo de Cámaras de Castilla y León, Antonio Miguel Méndez Pozo, ha precisado que el porcentaje de los empresarios partidarios de la energía nuclear en la Comunidad supera en diez puntos la media estatal, mientras en el caso de las centrales de carbón es cinco puntos mayor, informa Ical.
«El desmontaje de la central nuclear de Garoña fue un error, aunque en España hay cierto temor a hablar a favor de la energía nuclear y habría que plantear un gran acuerdo sobre este tema entre el gobierno estatal y las comunidades autónomas», ha afirmado el también presidente de la Cámara de Comercio de Burgos, quien ha asegurado que el porcentaje de empresarios partidarios de no rechazar ninguna forma de energía puede ser incluso mayor, porque «decir que estas a favor de la energía nuclear está mal visto».
Fondos sin impacto
Aspectos como el coste energético y de algunas materias primas, la guerra de Ucrania o la dificultad de las pymes, sobre todo de las más pequeñas, para acceder a los fondos europeos Next Generation han provocado que el 66% de los encuestados, todos ellos titulares de empresas de más de seis trabajadores, se hayan mostrado poco o nada optimistas respecto a las perspectivas de futuro.
De hecho, Méndez Pozo ha recordado que el 98% del tejido empresarial de Castilla y León está formado por pymes y micropymes que tienen limitaciones para ser competitivas y para acceder a beneficios como los fondos europeos, pese al apoyo de las Cámaras de Comercio.
Méndez Pozo ha llamado también la atención sobre que el impacto de estas partidas «no está siendo tan potente como cabría esperar» porque «hay incapacidad para gastar de forma adecuada esos fondos para que provoquen realmente un cambio estructural profundo y rápido».
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