ruido blanco
Faltan mediadores
Tiempos extraños en los que conviven chantajes consentidos con cordones sanitarios
Valladolid ni se nombra
Mujer sobre fondo negro
La de mediador es una profesión con futuro. Una opción «con salidas», que se decía antes. Si algo demuestra el fracaso de la política es que nos faltan mediadores ahora que estos árbitros innecesarios entre partidos son imprescindibles. Hay mediadores en las negociaciones entre Junts ... y el Gobierno, entre ERC y el Gobierno, y hasta entre PP y PSOE reunidos ¡en Bruselas! para renovar el Consejo General del Poder Judicial. Las universidades que se forraron con los master en Community Magnagement preparan de urgencia temarios para sacar nuevas titulaciones para mediadores con diploma y prácticas entre Waterloo y el Congreso de los Diputados.
Resulta que también nos van a hacer falta mediadores en las Cortes de Castilla y León. La incomunicación irreconciliable entre PP y PSOE mantiene (aquí también) bloqueada la renovación de las cuatro instituciones propias de la comunidad autónoma. Todas con el mandato caducado y sin acuerdo a la vista. El mediador entre partidos con representación parlamentaria en una democracia consolidada es la excusa inventada por los políticos para justificar la irresponsabilidad de incumplir sus obligaciones. Hasta no hace mucho estas renovaciones que regula el Estatuto de Autonomía eran una cuestión de Comunidad que quedaba al margen de las discrepancias coyunturales. Pero eran aquellos tiempos en los que había cuestiones de Comunidad igual que en España había cuestiones de Estado.
La política en la actualidad consiste en llegar a desacuerdos considerando el diálogo entre diferentes un síntoma de debilidad. Tiempos extraños en los que conviven chantajes consentidos con cordones sanitarios. Las negociaciones son siempre un conflicto que necesita mediadores como abogados en los divorcios. Su única misión es minimizar daños mientras que ambos saquean al contrario. El mensaje de los partidos políticos pidiendo ayuda ante la incapacidad para pactar nada ni cumplir sus deberes en el sistema es muy dañino para la ciudadanía. Van a faltar mediadores a paladas. Estoy empezando los trámites para exigir un mediador y negociar el pago de mis impuestos con la Agencia Tributaria.