Mañueco apela al autonomismo «leal y útil» frente a los que buscan romper fronteras

Mañueco indicó que hoy en día resulta «más necesario e imprescindible que nunca» velar por el cumplimiento de la Carta Magna, porque se vive un momento de «incertidumbre e inestabilidad» en el que es necesario hacer un «esfuerzo de pedagogía» para poner en valor lo conseguido en derechos y libertades y servicios públicos.

Unos logros, según advirtió, que «no están garantizados a perpetuidad» y por ello reclamó «mimarlos y enriquecerlos». El presidente regional criticó a quienes actualmente buscan «la confrontación y levantar fronteras donde no las hay» y frente a ellos defendió el autonomismo que practicó su predecesor, que fue útil, leal y solidario. Tras subrayar que Castilla y León es una comunidad «histórica y cultural» con origen en los antiguos reinos de León y de Castilla, Mañueco se comprometió a trabajar por Castilla y León «desde la lealtad al proyecto común de España». En ese contexto, reclamó que el nuevo modelo de financiación autonómica sea consensuado y pactado por todos en el marco del Consejo de Política Fiscal y Financiera y no se de «una financiación especial» a algunas comunidades autónomas como pretenden algunos políticos. El nuevo modelo financiero deberá valorar el coste real de los servicios públicos, la dispersión geográfica, la extensión territorial, el envejecimiento de la población o la baja densidad demográfica de Castilla y León, según reivindicó el presidente autonómico. También se refirió a la estabilidad política de España, que consideró necesaria para seguir avanzando en el progreso social, cultural y económico del país, dentro del marco constitucional.

Fernández Mañueco realizó esa reflexión en Zamora, en la toma de posesión de Juan Vicente Herrera como consejero nato del Consultivo, acto en el que el expresidente regional también se atrevió a radiografiar la actual situación política española para reivindicar la Carta Magna española frente a quienes «se obstinan en que definitivamente se rompa este traje demográfico que es el modelo autonómico».

Herrera puso en valor la Constitución española de 1978, uno de los logros de la Transición, que consideró necesario poner en valor frente a quienes «se empeñan en que no sirve». También esgrimió el marco constitucional para hacer frente a las «tensiones» y a quienes durante la última campaña electoral ofrecieron «fórmulas absolutamente espurias» en las que planteaban la falsa diyuntiva de que había que optar entre Autonomía o el pago de las pensiones.

Por su parte, el secretario general del PP y mano derecha de Mañueco en el organigrama autonómico de su partido, Francisco Vázquez, se sumó a la cuestión del Estado de las Autonomías y de forma concreta a la aspiración de Cataluña de ser reconocida como nación. Al respecto, pidió a los socialistas de Castilla y León que se pronunciaran sobre unas declaraciones realizadas el pasado fin de semana por Miquel Iceta y clarificaran si ellos también piensan que en España hay nueve naciones. El dirigente del PSOE catalán aseguró que, por los estatutos de Autonomía, nueve comunidades podían considerarse naciones, por lo que Vázquez pidió al PSOECyL que diga si piensa lo mismo, ya que entre esas Autonomías con categoría de nación no se incluían comunidades como Castilla y León. El secretario autonómico del PP echó en cara a los dirigentes del PSOE que no se pronuncien sobre esta cuestión porque «solo hablan de lo que les interesa» y no quieren hacerlo sobre «las pretendidas naciones que hay en la nación española».