«Estabilizado» el fuego de Castrocontrigo tras arrasar 10.000 hectáreas

Además, y pese a que desde la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta el fuego se daba ayer por «estabilizado» , el intenso calor y el viento reinante en la zona elevaban el riesgo de posibles reproducciones, lo que no permitió hasta la caída de la noche la reducción del nivel de alerta. Aún así, advirtieron de que podría producirse «un cambio en la evolución en cualquier momento» si las condiciones meteorológicas varían.

Para la zona, en la que los montes son su principal medio de vida, este fuego constituye toda una «catástrofe», más todavía si se tiene en cuenta que se trata de una parte de la provincia que habitualmente es castigada por las llamas. Aunque acostumbrado a los incendios, el alcalde de Castrocontrigo, Aureliano Fernández , coincide con sus vecinos al reconocer que en el municipio no se recuerda ninguno «igual» que el que están sufriendo en estos momentos y que, aunque se prevé que no amenace ya a ninguna población próxima, continúa extendiéndose por sus montes y arrasando todo lo que encuentra a su paso.

Fernández recordó que «en algún momento» se han sentido completamente «acorralados por las llamas». Por eso, destacó que tras la sensación de «impotencia» inicial al ver que los montes ardían sin que nadie pudiera hacer nada para frenar las llamas, y tras la «catástrofe» y el «grave problema» que ha supuesto el fuego para la zona, ahora se siente en cierto modo «aliviado» al ver que se ha logrado un cierto «control» de la situación.

Según señala, «la tensión, los nervios y el insomnio» lo han acompañado durante los últimos cuatro días y, por ello, confió en que se pueda frenar a los culpables de situaciones como ésta, que han causado una pérdida que calificó como «irreparable». Con los nervios mucho más calmados, Fernández reconoció que tanto en Castrocontrigo como en los municipios próximos a los que se extendieron las llamas -Luyego, Quintana y Congosto y Destrinana- son «perfectamente conscientes» de que están «rodeados de monte» y de que «en cualquier momento» se pueden ver afectados por un incendio. «Lo sabemos, pero es algo a lo que no puedes llegar a acostumbrarte», afirmó, y más todavía «cuando las llamas se extienden con la virulencia de los últimos días».

Lo cierto es que, según dijo, «casi todos los años se quema parte del monte», compuesto principalmente por pinos y que, apuntó, «siempre ha sido parte de la vida de estos pueblos» , aunque ahora podría convertirse en toda una «pesadilla» para los vecinos.

Aunque no se recuerdan fuegos de la magnitud del que durante estos días arrasa esta parte de la montaña leonesa, durante los últimos años esta zona ha concentrado los incendios de mayores dimensiones de la provincia , en su mayoría de origen intencionado. Los vecinos del lugar recuerdan especialmente el fuego que hace más de una década sufrió Tabuyo del Monte y que fue provocado durante unas prácticas militares realizadas en el campo de tiro del Teleno. En ese momento, ese incendio desató una «catástrofe» para la zona.

Hasta el momento, y según las estimaciones realizadas ayer por el helicóptero coordinador de la Junta, se habrían quemado unas 10.000 hectáreas. Un operativo de unas 600 personas continúa trabajando en la zona para sofocar el incendio, labores en la que hay desplegados 26 medios aéreos y otro buen número de reservas.

Por otra parte, la Junta dio ayer por controlado el incendio en la localidad burgalesa de Fresno de Rodilla que este martes llegó a alcanzar nivel 1 y declaró extinguido el fuego desatado el domingo en Solana de Ávila, que ayer se reactivó de nuevo, siendo otra vez controlado, aunque aún no se ha perimetrado la superficie calcinada por las llamas.