Núñez presenta su modelo fiscal de bajada de impuestos para Castilla-La Mancha y afirma que el «cambio político ya se ha activado»

«El cambio para mejorar el futuro de nuestra tierra ya se ha activado y llegará en 2027. Pero los castellanomanchegos no pueden esperar dos años. Y, por eso, nosotros no vamos a esperar», afirmó Núñez, quien anunció que su grupo parlamentario registrará en los próximos días sus propuestas en las Cortes regionales.

Durante su intervención, Núñez denunció que Castilla-La Mancha es actualmente una de las comunidades autónomas con mayor esfuerzo fiscal, lo que obliga a sus ciudadanos a pagar más impuestos en relación a su renta.

Explicó que esto se debe, entre otras razones, a que la Junta no ha deflactado el tramo autonómico del IRPF. «La única comunidad autónoma que se niega a deflactar la tarifa autonómica del IRPF es hoy Castilla-La Mancha», apuntó, y añadió que «hacer la renta en Castilla-La Mancha sale más caro que hacer la renta en Madrid, en Murcia, en Extremadura o en Andalucía».

La propuesta del PP, además de la deflactación del tramo autonómico del IRPF, incluye la eliminación del impuesto de sucesiones y donaciones, la reducción del impuesto de transmisiones patrimoniales del 9% al 6%, y al 4% para la compra de la primera vivienda, así como la rebaja del impuesto de actos jurídicos documentados a la mitad.

Núñez explicó que la diferencia fiscal entre comunidades puede suponer un sobrecoste importante para los jóvenes que compran una vivienda: «Un joven que compra un piso en Illescas paga entre 12.000 y 18.000 euros más que si se lo comprara en Parla, localidad que está a cinco minutos«.

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El plan fiscal también prevé la ampliación del grado de consanguinidad en la sucesión de las empresas familiares, la reducción del 25% en los impuestos de compraventa de suelo industrial y logístico, y la supresión de tasas como las relacionadas con la presentación de libros contables, actas de cooperativas o depósitos de cuentas.

Núñez explicó que estas medidas están dirigidas especialmente a las empresas familiares, las pymes y los autónomos: «Es una propuesta fiscal que está pensada especialmente para ellos, para las empresas familiares de Castilla-La Mancha, para las pymes de Castilla-La Mancha, para los autónomos de Castilla-La Mancha».

El líder del PP contrapuso su modelo fiscal al del Gobierno regional, al que responsabilizó de frenar la competitividad. Según detalló, «mientras que el año pasado el crecimiento neto de autónomos en la Comunidad de Madrid fue de 10.931 autónomos, en Castilla-La Mancha solo fue de cinco». Añadió además que «la inversión extranjera en el año 24 en Castilla-La Mancha ha caído un 15% frente al 41% que ha crecido en Andalucía» y que «la constitución de empresas en Castilla-La Mancha ha bajado 20,7% en el año 24, frente al 1% que ha crecido, por ejemplo, en Extremadura».

«Esto sucede porque las políticas socialistas que se aplican en Castilla-La Mancha no benefician al conjunto del tejido productivo de la región», subrayó Núnez, que recordó que «el dinero donde mejor está es en manos de los ciudadanos».

Núñez también reivindicó el modelo fiscal de las comunidades gobernadas por el PP. «Allí donde hay un gobierno del Partido Popular en la sede autonómica, hay una política fiscal muy parecida a la que yo les acabo de proponer», dijo, y destacó que «el 70% de los españoles, hoy gobernados por el Partido Popular, tiene una política fiscal mucho más generosa de lo que lo tiene Castilla-La Mancha».

El dirigente popular cerró su intervención con un mensaje de compromiso: «Todo aquello que vamos a defender en sede parlamentaria es nuestro programa de gobierno. Y es mi compromiso. Y en él empeño mi palabra que lo desarrollaré al frente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha dentro de dos años».