Homenaje a la pintora Gloria Merino y su «exaltación sublime de La Mancha»

El vicepresidente segundo de la Junta de Castilla-La Mancha, José Manuel Caballero; el alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, y la comisaria de la exposición, Ana María Fernández Rivero, inauguraron este lunes la exposición en la que también estuvo presente la propia pintora, que precisamente este martes cumpe 95 años.

Gloria Merino, nacida en Jaén, pero criada en Malagón, supo capturar con su pincel la esencia de la tierra manchega, desde sus paisajes hasta sus gentes, combinando el realismo expresionista con influencias cubistas y un uso del color cercano al fauvismo. Desde sus primeros bocetos hasta sus piezas más reconocidas, la exposición traza un recorrido por la evolución artística de Merino, cuya obra se distingue por una paleta vibrante y una mirada profunda hacia la vida rural, según explica la comisaria de la exposición.

Entre las piezas expuestas más destacadas se encuentra 'La vuelta del campo' (1975), galardonada con la Medalla de Oro en la Exposición Nacional de Valdepeñas, y 'Casas de Argamasilla' (1972), un homenaje a los paisajes manchegos.

Durante la inauguración de la exposición, el vicepresidente segundo de la Junta definió a Merino como «una embajadora de los orígenes y la identidad de La Mancha», resaltando que su obra refleja «los rigores de esta tierra», como la austeridad y el trabajo, «pero también la dignidad, la esperanza y la ilusión» de la población manchega.

Asimismo, Caballero subrayó que esta exposición constituye «un acto de justicia» con el legado de Gloria Merino y una oportunidad única para que las nuevas generaciones se acerquen al arte y comprendan las raíces que definen la identidad manchega.