Muere Mariano Alique, el jesuita que «mantenía» a 40 ancianos gracias a la venta de sus pinturas

El jesuita ha vivido los últimos años en una casa de reposo de la orden en Cochabamba, aquejado por problemas de la vista que le impidieron siguir expresando su creatividad a través de la pintura al óleo. «Unámonos en oración pidiendo su descanso eterno en la morada del Señor, a quien con tanto cariño ha servido», expresó la Compañía de Jesús en Bolivia al momento de informar sobre el deceso en sus redes sociales.

Pintaba representaciones de los corales con contrastes de colores, una técnica que denominó de «fondos marinos» y que fue un rasgo «único» en su obra, además de propuestas de arte abstracto e imágenes del altiplano. Alique, además, tenía un blog en internet, donde aún se puede apreciar una galería en línea en la que también se detallan algunas de sus exposiciones más importantes entre 1994 y 2010.

Alique ingresó en la Compañía de Jesús en 1955 y llegó a Bolivia como misionero en la década de los 60. La mayor parte de su labor la realizó en la pequeña comunidad aimara de Qurpa, en el altiplano de La Paz, cerca del lago Titicaca. Recolons recordó que Alique trasladaba a los enfermos de la comunidad hasta La Paz para que recibieran una atención especializada y que hacía «varias veces a la semana» esos viajes de 122 kilómetros.

Algunos allegados de Alique también lo recuerdan por su afición al fútbol, ya que llegó a disputar partidos en la liga de la comunidad y fue un infalible espectador en el estadio 'Hernando Siles' de La Paz cuando jugaban los equipos Bolívar y The Strongest.

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, escribió en las redes sociales: «Las pinturas de Mariano Alique (Guadalajara) han servido para mantener en Bolivia a decenas de ancianos. Hoy nos deja pero queda su ejemplo, su enorme generosidad. Todo mi cariño para sus allegados».