Un canterano del Madrid imputado por difundir el video sexual bloquea el proceso: «Las pruebas deberán ser declaradas nulas»

El juez canario a cargo del caso, Julio Wood, del Juzgado de Instrucción Número 3 de San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria), ha detenido el volcado de material de los móviles de los cuatro canteranos investigados con el fin de estudiar y «resolver los recursos presentados» por parte de la defensa de uno de los investigados y del ministerio fiscal. «Las pruebas obtenidas de este modo deberán ser declaradas nulas»«, ha advertido la defensa de Raúl Asencio, uno de los futbolistas imputados.

A su juicio, se confunde «el indicio con la sospecha» y pide que se siga el criterio de la Fiscalía, acotando la información a extraer desde el día de los hechos en adelante, la difusión del mismo por «cualquier medio», y las conversaciones mantenidas entre los investigados desde entonces hasta que se les incautaron los teléfonos, el pasado 14 de septiembre. Se «está emprendiendo una investigación prospectiva prohibida en nuestro derecho», ha declarado su abogado defensor Juan Gonzalo Ospina.

Asencio es el único que no participó de los hechos, ya que según relatan los testigos estaba con la tercera de las chicas en la zona de la piscina, aunque sí recibió el video. Concretamente la imputación se debe a que un testigo afirma que «le enseñó el vídeo en cuestión en su móvil», aunque la defensa alega que no se dan más detalles al respecto, y la información es difusa ya que es tras recibirlo de algún otro de los investigados pro no precisa cuál y a través de Instagram o de WhatsApp sin tampoco saber precisar la plataforma concreta.

Este proceso podría estar resuelto a finales de esta semana o a comienzos de la próxima y continuar así adelante con la investigación de la causa. Están acusados de delitos contra la intimidad. La primera declaración en sede judicial de los imputados, previsiblemente, se realizará el próximo 8 de noviembre.

Los hechos ocurrieron en una zona privada del Beach Club de Amadores, en el municipio de Mogán, en Gran Canaria, estando involucrados los canteranos del Real Madrid, Raúl Asencio, Ferrán Ruiz, Juan Rodríguez y Andrés García, junto a las dos víctimas, una de ellas menor de 16 años, y una tercera joven, amiga de éstas, que figura como testigo en la causa y que estaba en el lugar aunque no aparece en los vídeos.

Mientras mantenían relaciones sexuales con tres de los investigados (Ferrán Ruiz de 20 años, Juan Rodríguez, 21, y Andrés García, 20, del Real Madrid C), las dos víctimas se dieron cuenta de que estaban siendo grabadas, ya que que «al menos dos de los investigados, Ferrán y Juan, se pasaban el móvil para grabar». «La otra chica que figura como testigo, al ver que entraban y cerraban las cortinas de esta zona privada se fue a la zona de piscina comunitaria del Beach Club con Raúl», como expresa el escrito de la defensa.

Una de las víctimas ha señalado que el futbolista que mantuvo relaciones con ella tenía el móvil en la mano durante el coito, señalándole como origen de las imágenes. La otra víctima, por su parte, narró a Diario As en una entrevista que vio cómo uno de los chicos grababa a su amiga con el móvil, y «se le pasaba a otro de los jugadores, como si de una mano fuera a otra».

Las denunciantes exigieron que se borraran los vídeos y ellos, aparentemente, lo hicieron delante de ellas, pero el juez ve indicios de que los conservaron y los han difundido a terceras personas. Ha sido uno de los testigos quien involucra en la causa a Raúl Asencio, del Castilla, primer filial del Real Madrid, al asegurar que le enseñó el vídeo de las dos jóvenes manteniendo relaciones sexuales con los tres jugadores desde su móvil cuando ambos estaban juntos, tras recibirlo de algún otro de los investigados a través de Instagram o Whatsapp.

Se desconoce por el momento si los jóvenes imputados enviaron el vídeo en el lapso de tiempo entre grabarlo y que las víctimas solicitaran que fuese borrado o si por el contrario dijeron borrarlo y no fue así, pero la grabación llevaba semanas circulando en redes sociales y de mensajería antes del momento de la denuncia.

Aunque los hechos ocurrieron a mediados de junio, la menor y su madre, explicaron a la Guardia Civil que hasta ahora no habían tenido conocimiento de que esas imágenes existieran y se estuvieran difundiendo. Fue el actual novio de una de las víctimas el que dejó entrever que había visto un vídeo de ella manteniendo relaciones sexuales. En ese momento, la menor de edad, acompañada de su madre, acudió a formalizar la denuncia en el cuartel de Santa María de Guía.