Los dos bloques del CGPJ inician la negociación para renovar el Tribunal Constitucional

Progresistas y conservadores designan a sus representantes para iniciar el diálogo a un día de que venza el plazo impuesto por el Gobierno

Pleno del CGPJ celebrado el pasado jueves, con el presidente, Carlos Lesmes, en el centro EFE

Paso a paso y con sus propios tiempos. Así es como el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) apura las horas previas a que este martes venza el plazo que le impuso el Gobierno el pasado mes de julio para que elija a ... sus dos candidatos junto a los dos que corresponden al propio Ejecutivo para renovar un tercio del Tribunal Constitucional (TC).

En la misma víspera, los bloques conservador y progresista del CGPJ ya tienen claro quién les representará en la negociación que arrancan este lunes para consensuar dos candidatos y alcanzar así la mayoría suficiente de tres quintos que requieren esos nombramientos. Con la actual composición de este órgano, con 18 vocales y el presidente, Carlos Lesmes, esa mayoría cualificada es de 12 votos.

Según fuentes de la propia negociación, los ocho vocales conservadores más críticos con las presiones del Gobierno estarán representados por José Antonio Ballestero y Carmen Llombart. Este sector tiene los votos suficientes para impedir esa mayoría de tres quintos, ya que el resto de vocales y Lesmes sólo suman 11, uno menos de los necesarios.

Ballestero y Llombart empezarán a negociar este mismo lunes con el sector progresista, representado por Álvaro Cuesta, Rafael Mozo y Roser Bach. Aunque minoritarios en el actual CGPJ, los progresistas coinciden en este caso con Lesmes y otros dos conservadores, que se inclinaban por nombrar a sus candidatos al TC antes de la fecha impuesta por el Gobierno en la contrarreforma del pasado mes de julio. La misma que enmendaba a su vez la que había aprobado un año antes para impedir al CGPJ hacer nombramientos mientras siga en funciones, como lleva desde hace cuatro años.

Votación clave

Ambas reformas, tan polémicas como contradictorias, colmaron la paciencia de la mayor parte del sector conservador, que las ha calificado como «manoseo indecente» del CGPJ. Como mínimo, este ya ha conseguido marcar sus propios tiempos al margen de esas presiones y prisas del Ejecutivo de Sánchez, algo a lo que también han accedido los vocales progresistas.

En el pleno del CGPJ celebrado el pasado jueves, unos y otros consensuaron las reglas del juego para una votación que invertirá la mayoría del Tribunal Constitucional, al pasar de conservadora a progresista gracias a los dos candidatos que designe el Gobierno y los dos del propio Poder Judicial, cuya tradición es nombrar uno de cada sensibilidad.

La designación de los interlocutores de cada bloque es el primer paso para una negociación que empieza ahora y cuyo resultado no tiene fecha ni hora, desde luego no la que impuso el Gobierno. La votación se producirá a propuesta del propio presidente del CGPJ o de al menos cinco vocales, como marca la ley, con el nombre de los dos candidatos propuestos y cuando ambos sectores alcancen un acuerdo mínimo para que se lleve a cabo con éxito.

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