Arrimadas reacciona al veto de Vox en el Congreso: «Es una vergüenza que se te quite la palabra por llamar a los de Bildu 'filoterroristas'»

Todo comenzó la semana pasada durante el debate de los Presupuestos, cuando otra parlamentaria de Vox dijo que el único logró de la ministra de Igualdad era haber «estudiado en profundidad a Pablo Iglesias», su exmarido y exvicepresidente del Gobierno. Montero aprovechó la ocasión para acusar a los de Abascal de ejercer «violencia política» contra su persona, para después proclamar que «las feministas y las demócratas somos más. Les vamos a parar los pies a esta panda de fascistas con más derechos».

Pero la cosa no quedó ahí. La ministra de Igualdad ha acusado este miércoles por la mañana al Grupo Parlamentario Popular de«promover la cultura de la violación» en mitad de la sesión de control al Ejecutivo en el Congreso. Unas palabras de la número dos de Unidas Podemos que han desatado el descontrol en la bancada del PP, ya que incluso Meritxell Batet ha tenido dificultades para poner orden.

El doble rasero de la Mesa del Congreso ha hecho que sea acusada de actuar con pasividad, además de crispar a más de un miembro del resto de bancadas. Entre ellos, la líder de Ciudadanos Inés Arrimadas, quien se ha pronunciado al respecto: «Es una vergüenza que en este Parlamento se te quite la palabra por llamar a los de Bildu 'filoterroristas' y que luego la ministra pueda decir a todo el mundo que somos fascistas, y que aquí se promueve la cultura de la violación«.

La actual presidenta de la formación naranja arremete contra el Gobierno en los pasillos del Congreso y ha confesado estar harta de «las pasadas de Irene Montero» y de que «llame fascista a todo el mundo». En su opinión, se trata de una acción «intolerable»: «Lo que es intolerable es que el PSOE le quite la palabra a un diputado de Vox y que luego permite verter todas estas cosas contra cualquier diputado que no sea de la bancada del Gobierno».