Susana Díaz pierde el control de su futuro político con la convocatoria de las primarias del PSOE en Andalucía

Ferraz ya había tomado la decisión hace semanas aunque ayer se materializó en la reunión de la Ejecutiva Federal que, tras analizar la situación del partido tras la derrota electoral en la Comunidad de Madrid, aprobó la convocatoria de las primarias para el PSOE de Andalucía, cediendo por fin a las presiones de los críticos que llevan más de un año —desde enero de 2020— pidiendo una intervención en el partido en Andalucía.

Así, los 44.000 militantes del PSOE andaluz están convocados a las urnas para elegir el próximo 13 de junio al candidato a la Presidencia de la Junta, al rival que se enfrentará a Juanma Moreno por el Gobierno en Andalucía. Y ya tienen a dos candidatos, Susana Díaz y Juan Espadas aunque es previsible que se presenten al menos uno o dos más.

La secretaria general de los socialistas andaluces ya lo había advertido:se presentará a las primarias y por eso lleva más de tres meses recorriendo Andalucía haciendo campaña interna. «No me interesa el poder por el poder ni ascender en mi trayectoria política. Decidí hace tiempo que mi futuro está ligado a la tierra que me vio nacer», dijo ayer a los medios.

Resulta curioso analizar las palabras con las que cada uno de ellos definieron el proceso: mientras Susana Díaz hablaba de «ruido», Juan Espadas se refería a la «ilusión» en un acto acompañado por María Jesús Montero y por muchos alcaldes socialistas de la provincia de Sevilla que ya le habían entregado su apoyo.

El nuevo escenario que se abre deja el futuro político de ambos en manos de los militantes. Susana Díaz , que es aparato puro, que es la secretaria general del PSOE andaluz, la federación más poderosa del partido, dependerá de los militantes para mantenerse en su puesto. Porque ya ha tenido hasta tres ofertas de Ferraz para salir de Andalucía... y las tres las ha rechazado, la última el pasado enero cuando Ábalos le dijo que eligiese su propio destino.

Consciente de sus palabras, Díaz pidió unas primarias «sin empujones» , «en libertad, sin imposiciones y con autonomía», mensajes que sus partidarios repiten por todas las esquinas y en el que continuarán insistiendo hasta el día de las votaciones.

La convocatoria de las primarias abre la caja de Pandora para el PSOE andaluz. Si hasta ahora la voz de los socialistas había permanecido casi muda en la oposición a Juanma Moreno , el presidente andaluz ya sabe que en los bancos de enfrente las preocupaciones están en otros asuntos.

Susana Díaz es consciente de ello y ayer se refirió varias veces a que esta disputa interna, «que no interesa a nadie», debe terminar cuanto antes porque «erosiona al partido». La disputa interna será ahora a campo abierto; se acabaron las conspiraciones y las reuniones más o menos discretas. Los manijeros de ambas campañas ya tienen hechas muchas cuentas pero ahora es cuando empieza el baile.