PP y PSOE se echan en cara la muerte de pacientes por los recortes en sanidad

Moreno reprochó a la mandataria autonómica «sus recortes, falta de planificación y excesiva politización de la sanidad pública» y bromeó con el hecho de que un mismo hospital, el de Loja, en Granada, haya «sido inaugurado por tres presidentes de la Junta (Chaves, Griñán y la propia Díaz) con una diferencia de ocho años». Le recordó que «los profesionales sanitarios la llaman Susana manostijeras». Fue entonces cuando esgrimió el acuerdo de una unidad clínica de gestión de un centro sanitario (donde se establecen los objetivos del personal) y le pidió explicaciones por la muerte de pacientes. «¿Acaso es que mueren pacientes en lista de espera , debería explicarlo inmediatamente?». «Los andaluces padecen las listas de espera y la suspensión de pruebas diagnósticas porque usted lo manda», le reprochó.

La presidenta lamentó que «ha hablado de dejar a la gente morir en lista de espera. Tiene cerca Galicia», en alusión a la decisión de la Fiscalía de Santiago de Compostela atribuir a dos altos cargos de la Consellería de Sanidad de la Xunta de Galicia un delito de homicidio imprudente por retrasar los fármacos de la hepatitis C con «razones presupuestarias». Mario Jiménez , el portavoz del PSOE, aseguró, por su parte, que «el Gobierno de España nos castiga por salvar vidas».

Susana Díaz negó recortes en Andalucía y utilizó su munición contra las recetas sanitarias del Ejecutivo del PP. «El mayor atropello a la sanidad pública fue cuando se terminó con la sanidad universal, se impuso el copago sanitario y se desataron mareas blancas donde ustedes gobernaban. Usted era la mano derecha de la señora Mato en ese Ministerio. Mientras algunos cerraban hospitales nosotros mantuvimos el servicio público », advirtió. Acusó a Moreno de crear «alarma y desprestigiar la sanidad pública para favorecer los intereses privados de los que quieren hacer negocio con la sanidad».

Juan Marín , portavoz de Ciudadanos, le volvió a exigir a la presidenta que baje el impuesto de sucesiones , uno de los más elevados de España, para reactivar la economía y crear empleo. Pero la presidenta no concretó cuándo adoptará esta medida recogida en el acuerdo de investidura, para la que se ha creado un grupo de trabajo, y apostó por huir de una bajada «indiscriminada de impuestos».

El portavoz de IU, Antonio Maíllo , centró su intervención en la defensa de la educación pública frente a los conciertos coin centros privados y, en clave más electoral, avisó del « miedo escénico» del PSOE a la confluencia de partidos de izquierdas.

En un tono más social, la representante de Podemos en la Cámara, Teresa Rodríguez , pidió a Susana Díaz que sea « mujer de una sola palabra » y a la vez que se opone a la postura de la UE respecto a la crisis de refugiados sirio, se ponga en contra de la violación de los derechos humanos en el Sáhara. La presidenta anunció que el Gobierno de España hoy le ha anunciado que llegarán a Andalucía 25 refugiados , cinco de ellos menores, y pidió «no buscar el rédito político y no hablar de bases y de Rota y de cuestiones que no vienen al caso cuando se esta muriendo gente».