La Junta recauda más por herencias pese a reformar el impuesto de sucesiones

Los datos provisionales de la Estadística de Recaudación Tributaria que publica la Consejería de Hacienda y Administración Pública son tozudos. En el primer semestre de 2016, la Junta había recaudado por este tributo 172,72 millones de euros . En el mismo periodo del presente año, los ingresos alcanzaron los 175,70 millones de euros en toda la comunidad. En el desglose por provincias, la recaudación ha crecido más en Málaga (35,25%) y Huelva (32,17%).

¿Por qué no se ha notado esta reducción en la recaudación? En el cómputo se incluyen las cantidades correspondientes a liquidaciones de ejercicios anteriores, según se hace notar en el cuadro que difunde la Consejería, pero esto sucede todos los ejercicios. En la estadística también influye el número de decesos que se produce en dicho periodo , que suele registrar pocas variaciones.

Hasta el 31 de diciembre las herencias que reciben parientes directos no tributaban hasta los 175.000 euro s. Desde el 1 de enero, el mínimo exento se eleva hasta los 250.000 euros, lejos de los 350.000 que empezó proponiendo Ciudadanos en sus negociaciones con los socialistas. Cuando un padre deja a su hijo una herencia de entre 250.000 y 350.000 euros, los primeros 200.000 euros están exentos. Es decir, para una herencia de 300.000 euros, el impuesto se calcularía sobre los 100.000. Cuando se hereda la vivienda que es domicilio habitual , la bonificación oscila entre el 100% para los inmuebles de menos de 122.606 euros al 95% para aquellos cuyo valor supere los 242.000 euros.

Por otro lado, la reforma introdujo novedades en las herencias en el campo . Desde hace un año ya no se tiene en cuenta el nivel de ingresos que genera la agricultura para acogerse a bonificaciones. Antes se exigía que fuera la principal fuente de renta.

Sin embargo, la rebaja se ha quedado corta. Ante la fuerte contestación social que tiene este impuesto en Andalucía , donde se ha creado un plataforma que exige suprimirlo, Ciudadanos ha condicionado la aprobación de los presupuestos de la Junta para 2018 a pactar una nueva reducción.