La Junta de Andalucía amplía a más gestiones la tramitación robotizada

El proyecto también ha sido reconocido por el Gobierno central, que ha concedido un accésit de los Premios a la Excelencia en la Gestión Pública a este proyecto, algo de lo que se sienten especialmente orgullosos desde el Ejecutivo de Juanma Moreno.

Los robots, cuenta Raúl Jiménez, presidente de la Agencia Digital Andaluza (ADA), son en realidad ordenadores . No hay que imaginar máquinas humanoides. Se trata de computadoras que, gracias a la automatización de ciertos procesos , son capaces de gestionar datos a una gran velocidad.

Cuando un ciudadano presenta una solicitud de renovación de una pensión no contributiva , añade Jiménez, la administración tiene que comprobar que cumple todos los requisitos. «Eso implica mirar su padrón, para ver cuántas personas viven con él, los datos IRPF de cada conviviente, las vidas laborales...», detalla. En total hay que pedir datos de cinco administraciones diferentes para cada caso.

Lo que se ha conseguido ahora con este sistema automatizado es que sea un robot el que haga todo ese trabajo que antes realizaba un funcionario a mano. El ordenador mira el nombre, consulta el padrón y descarga la información del solicitante y convivientes. ¿Cumple los requisitos? Pensión renovada. ¿No los cumple? Se deniega.

La media de personas en un hogar con pensión no contributiva es de tres. Hay cien mil beneficiarios de pensiones no contributivas y se deben mirar cinco variables para cada uno. Las cuentas son que se han llegado a hacer un millón de accesos a bases de datos para comprobar números . Además, presume Jiménez, con los robots han liberado 90.000 horas de trabajo de personal de la Junta que, gracias a esto, se puede dedicar a otras tareas.

Sin embargo, puntualizan desde la Junta, los robots no trabajan sin supervisión . Solo el 40 por ciento de los expedientes que revisan acaban en una resolución sin intervención humana. En el otro 60 por ciento se presentan incidencias que va resolviendo una persona. Son trabajadores públicos que la Junta de Andalucía pone de ejemplo como adaptación a una nueva forma de trabajo.

La idea que plantean desde el Gobierno andaluz es que este modelo de automatización de procesos repetitivos prueba ampliarse a cuantos procesos sea posible . Ya se ha usado en la gestión de fondos Covid y en las ayudas de autónomos. También quieren usarlo ahora para generar los libros de familia numerosa.

«De forma cuasi inmediata, el interesado presenta la solicitud de libro de familia numerosa y un robot busca accede a la información y lo genera al momento si todo está en orden», explica el director de la ADA. Esto supondría un salto en la atención al ciudadano, valora, porque permitiría resolver papeleos en horas.

Explican desde la Consejería de Presidencia, Administración Pública e Interior, de la que depende la ADA, que con el proyecto de las pensiones han logrado establecer una «una nueva forma de trabajar». Es decir, un sistema que se puede aplicar siempre que se pueda. El único límite es que haya tareas administrativas repetitivas que puedan hacerse con un ordenador bien programado. Trabajo para el ‘cuerpo de robots de la Junta’, que espera fichar más personal en breve.

Dentro de estas medidas para reducir los trámites administrativos se incribe el nuevo paquete legislativo de simplificación administrativa que hoy puede abordar el Consejo de Gobierno. Esta nueva reforma afecta a 70 normas y que incluye nuevas medidas de eliminación de burocracia, agilización de trámites y mejora de la calidad regulatoria, según se anunció el pasado martes. Desde el cambio de Gobierno en 2019, la Junta ha revisado la mitad de los 1.838 trámites para eliminar trabas y fomentar la economía.