José Fiscal: «Devolver la gestión de Doñana al Estado ni se plantea ni se planteará»

-¿Ha sido para el consejero mucho más que un gran incendio?

-He de reconocer que he vivido el incendio con una intensidad especial. Es una zona que amo profundamente. Uno de los lugares del mundo con los que me siento más identificado. Para mí ha sido un sufrimiento especial.

-¿Cuál fue el momento más crítico?

-Entre la una y media y las siete de la tarde del domingo. Hubo un cambio de viento brutal con una velocidad tremenda y según los técnicos del Infoca, la prioridad pasaba a ser que no hubiera víctimas. Las llamas en ese momento eran imparables. Luego amainó el viento y ahí fue cuando empezamos a ir por delante del incendio.

-¿Después de ver cómo han trabajado los bomberos forestales... se entiende mejor que pidan cobrar más y tener mejores condiciones laborales?

-El dispositivo del Infoca es una emblema de la Junta de Andalucía y es uno de los colectivos con mejor reputación entre la ciudadanía. Hay comunidades y países que nos piden compartir el modelo. En cuanto a las condiciones de trabajo ha habido en los últimos dos años un cambio importante en las condiciones de trabajo. Se firmó una ultraactividad del convenio colectivo y reconocimos la categoría profesional de bombero forestal, reivindicada por el colectivo desde hace tiempo. Ahora el Gobierno tiene que aprobar coeficientes reductores para que los bomberos forestales se puedan jubilar antes y que permita refrescar el dispositivo. Sin ánimo de buscar confrontación con el Gobierno central, le pedí a la ministra que presente ya los coeficientes que nos permita que los bomberos que lleguen a los sesenta años se puedan jubilar. Hemos contratado este año 275 personas de forma temporal y hemos aprobado las prejubilaciónes parciales para que voluntariamente los bomberos puedan jubilarse de marzo a noviembre para evitar que la gente de más edad pueda estar en su casa en la temporada de alto riesgo de incendio. No obstante, nuestro objetivo es seguir avanzando en la mejora de condiciones y abordarlas tras el periodo de verano, como por ejemplo que en la bolsa de trabajo no haya discontinuos sino que todo el personal sea fijo.

-¿Ha habido en realidad tanta colaboración entre políticos de distintas administraciones y partidos en la gestión del incendio?

-Absolutamente. La coordinación en el puesto de mando avanzado ha sido ejemplar y desde mi punto de vista una de las claves por las que el incendio no ha ido a más. El incendio tenía una capacidad de destrucción de más de cuarenta mil hectáreas. Y la coordinación con la Delegación del Gobierno ha sido excelente. Las decisiones se tomaron de forma conjunta. La participación de la Unidad Militar de Emergencias de inmediato fue ejemplar. Sé que Antonio Sanz ha hecho declaraciones en ese sentido. Y es la realidad y el mejor camino, para abordar una emergencia de la mejor forma posible.

-¿Les sorprendió la respuesta de los ciudadanos en momentos más propios para el pánico?

-A mí personalmente no. La gente sabe lo que tiene que hacer y muchas veces nos da lecciones a los políticos. No oculto que cuando hubo que decir que Matalascañas quedaba confinada con las carreteras cerradas había preocupación, pero se le explicó a la gente allí y no hubo rechazo ni incomprensión, sino colaboración. Que en un incendio tan complicado como este no haya habido ni un herido en una zona tan complicada, con núcleos turísticos, hoteles, campigns, parador , asentamientos agrícolas dispersos... yo creo que francamente es para estar orgullosos.

-El incendio ha planteados dudas sobre la prevención sobre el terreno era la adecuada y si se han hecho esas labores correctamente el pasado invierno, dada las complicaciones que existen con la gestión de los contratos?

-La mitad del presupuesto del dispositivo Infoca, unos 80 millones, se destinan a obras, bianuales o quinquenales, de prevención. Las actuaciones se hacen fuera del periodo de alto riesgo de incendio. Todas las que estaban previstas se han hecho entre el otoño del año pasado y el principio de esta primavera. Es cierto que hay algunos pliegos que se han retrasado por incidencias como la reclamación de alguna empresa, pero afecta a licitaciones de obras que no se hacían en este invierno primavera. Se resolverá y se hará dentro de los plazos previstos. Hay que tener en cuenta que sólo en la provincia de Huelva hay 5.800 kilómetros de cortafuegos. Sólo en Doñana y su entorno hay 1.900 kilómetros, como de aquí a París. No se hacen todos los años trabajos manuales porque son cortafuegos de arena y necesitan un mantenimiento menor que los de las sierras. Se puede comprobar claramente en las fotos aéreas que los trabajos están hechos. Tampoco nosotros podemos dejar el monte como si fuera el jardín de una urbanización, porque ecológicamente no puede ser. El monte es el monte, y el matorral; lo que hay que hacer es adoptar medidas perimetrales de protección. Si se ve por el mapa de Google Doñana es una cuadrícula llena de cortafuegos. En prevención no hubo ningún problema.

-¿Qué piensa de la reivindicación de autorizar más usos tradicionales en el espacio natural?

-Yo soy un defensor de los usos tradicionales en los espacios protegidos, y si se comprueba que hay que optimizarlos se hará sin ninguna duda. Es algo que repito constantemente: los ciudadanos tienen derecho y es bueno que utilicen los espacios naturales protegidos, porque es la manera de que la conozcan, los quieran y por tanto ayuden a su protección. Si tomamos decisiones a espaldas de los ciudadanos nos equivocaremos.

-¿Hay un protocolo que impide reforestar en la zona afectada antes de un año?

-Hay un protocolo del Ministerio, que nosotros compartimos al cien por cien, de carácter eminentemente técnico, que solo permite en el primer año adoptar medidas para evitar la erosión. Lo que se hace es ver cómo funciona la vegetación de forma natural en ese tiempo. Después se procede a la reforestación y restauración.

-¿Qué opina de los colectivos que han aprovechado el incendio de Moguer para insistir en mensajes apocalípticos sobre el futuro de Doñana?

-Creo que aprovechar un siniestro de este tipo para sacar tajada del tipo que sea me parece mezquino. Dicho lo cual, todo es mejorable y nosotros estamos por mejorar la protección de Doñana.

-¿Cree que esto puede reavivar la petición de una reversión de las competencias de Doñana al Estado?

-En ningún momento. De eso no hay duda. Ni entro en el debate, porque no se plantea, ni se va a plantear. Eso está fuera de cualquier duda. Doñana está bien gestionada y así se reconoce por la Unión Internacional para la Consevación de la Naturaleza, un organismo que asesora a la Unesco y a la ONU en la materia. Este organismo tiene una lista con los 25 espacios protegidos mejor gestionados de los miles que hay en el Mundo. De España solo hay dos. Doñana y Sierra Nevada.

-¿Cuándo podrá recuperar la zona afectada sus valores paisajísticos?

-Mientras el incendio está todavía técnicamente activo hemos tenido la primera reunión del plan de recuperación ambiental de la zona. Pero Doñana ha demostrado a través de la historia que es como se dice ahora resiliente, se va adaptando a los cambios y estoy absolutamente seguro de que volverá a ser lo que fue y que nosotros lo veremos.