Diego Cañamero, diputado de Podemos por Jaén, ya pidió en 2012 la independencia de Cataluña

Las protestas protagonizadas por el diputado «insumiso judicial» (como se autoproclama para no acudir a los juicios ni a las citaciones judiciales derivadas de sus protestas) cautivaron a los dirigentes de la CUP, un partido antisistema y de corte netamente asambleario que entonces que ni siquiera tenía representación en el Parlament catalán. Cañamero fue invitado el 18 de noviembre de 2012 al acto central de la CUP-Alternativa de Izquierdas.

Ante un público entregado, que agitaba esteladas y banderas blanquiverdes con la estrella roja de cinco puntas (santo y seña de los independentistas andaluces) en el Barcelona Teatro Musical, Diego Cañamero manifestó su apoyo sin fisuras a los anticapitalistas de la CUP para separarse del Estado español.

Las palabras del diputado «jornalero» recibieron los aplausos de los antisistema: «Yo, sinceramente, os apoyo para que los pueblos y el pueblo catalán consiga todo lo que está pidiendo: su independencia ; realmente que consiga sus derechos porque tiene todos los derechos para reivindicarlo y luchar por ellos».

Cañamero fue incluso más lejos de la calculada equidistancia que mantiene el grupo de Unidos Podemos en el Congreso en la cuestión catalana. « Os damos nuestro corazón y nuestra alma para que sigáis luchando ». Y añadió: «Porque el día que Cataluña consiga todos sus derechos y todas sus libertades y realmente sea el pueblo el que gobierne, estaremos más cerca en Andalucía de conseguir nuestros derechos».

El hoy diputado de Podemos por Jaén también cargó contra los políticos corruptos que mantienen, según dijo, a los pueblos «esclavizados».

Durante los diez años, Diego Cañamero fue alcalde de El Coronil, un pueblo de apenas 5.000 habitantes a 58 kilómetros de Sevilla (1987/1991 y 1995/2001). En 2016 se estrenó como diputado de Unidos Podemos por Jaén con la promesa de «cambiar al dueño del cortijo».

Su sucesor al frente del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), Óscar Reina, se ofreció a colocar urnas en las ocho capitales andaluzas para respaldar desde Andalucía el referéndum ilegal del 1 de octubre. Además envió a «Observadores Internacionales Andaluces, con el fin de hacer más garante y dar más validez y apoyo» al «proceso de independencia».