El SAS prevé reducir un 60% la lista de espera quirúrgica hasta final de año
Entre junio y diciembre de 2023, creció en 17.000 el número de pacientes fuera de plazo de garantía
Destina 283 millones a agilizar las operaciones con más horas extra de sus profesionales y conciertos
La deuda del PSOE con las clínicas habría costeado 36.400 operaciones
Los consejeros Antonio Sanz, Catalina García y Ramón Fernández-Pacheco
Más pacientes que nunca esperan durante más tiempo para pasar por el quirófano en Andalucía. Si a 30 de junio de 2023 aguardaban 134.800 pacientes, de ellos 36.000 fuera del plazo de respuesta que se impone la propia Junta de Andalucía, con ... una demora media de 118 días, a 29 de diciembre, esta cifra se elevó a 142.507 pacientes. De ellos, 53.014 estaban fuera de plazo y la demora se extiende ya a los 150 días. Estos datos actualizados hasta finales de 2023, que no están publicados en el registro oficial, muestran una radiografía poco favorecedora del colapso que sufre la sanidad pública en Andalucía.
La propia consejera de Salud y Consumo de la Junta, Catalina García, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno andaluz puso de manifiesto el punto de partida de las listas de espera para, posteriormente, anunciar un nuevo plan de choque del Servicio Andaluz de Salud (SAS) que se marca como meta reducir en un 18% los pacientes pendientes de una cirugía desde el próximo mes de abril hasta diciembre de 2024. El objetivo es recortar en un 60% el número de las personas que están fuera de los plazos de 90, 120 y 180 días que establece por decreto el Sistema Sanitario Público de Andalucía, dependiendo del tipo de intervención. García no oculta que existe «preocupación» por la evolución de las listas de espera, pero añade que es un problema «estructural y compartido con otras comunidades».
Salud tiene identificado el mal: unas listas de espera disparadas. Para curarlo, va a emplear dos 'medicinas'. Por un lado, va a aumentar el presupuesto para pagar horas extraordinarias de sus profesionales. Por otro, va a reforzar los conciertos sanitarios con clínicas privadas para agilizar las operaciones que revistan «poca complicación» y tienen mucha demanda, como son las cataratas, hernias, sustituciones de rodilla o de cadera. La idea es que la sanidad pública se centre en los procesos más complejos.
Horas 'extra'
El plan cuenta con una dotación de 283,3 millones de euros, de los que la mayor porción, 163,3 millones de euros (un 34% más que en 2023) se destinarán al desembolso de las horas 'extra', la continuidad asistencial y los autoconciertos para tratar de agilizar estas intervenciones. El resto, 119,9 millones es el presupuesto reservado para suscribir los conciertos puente con clínicas privadas mientras se resuelven los acuerdos marco que se están tramitando en cinco provincias (Almería, Cádiz, Huelva, Jaén y Sevilla), utilizando la fórmula de contratos negociados sin publicidad. En Córdoba y Granada se están estudiando procedimientos similares. Málaga, en cambio, tiene contratos en vigor para apoyarse en la clínicas concertadas.
¿Por qué se han disparado las listas de espera? La consejera de Salud y Consumo, enfermera de carrera, identifica cuatro causas, que han dado lugar a esta tormenta perfecta: la reactivación de la actividad asistencial tras la pandemia por el Covid-19, el «grave déficit de profesionales sanitarios, el envejecimiento de la población que eleva el gasto y la demanda sanitaria y el fin de los conciertos con clínicas entre los pasados meses de enero y junio de 2023 en cinco provincias que todavía no se han renovado.
Parón en los conciertos
Esta interrupción ha supuesto que descienda un 40% el volumen de operaciones en la concertada respecto a 2022. Se tradujo en alrededor de 19.000 intervenciones quirúrgicas menos derivadas a las clínicas privadas.
La pandemia creó un cuello de botella que aún no se ha disipado. Entre 2022 y 2023 se realizaron un millón de consultas externas más, lo que conlleva el incremento de las indicaciones quirúrgicas como plan terapéutico. En concreto, en 2022 se realizaron 640.911 consultas más y en 2023, 494.576 más. Como consecuencia, se produjo un aumento de las indicaciones para procedimientos quirúrgicos.
La Junta busca médicos y no los encuentra. Faltan anestesiólogos, médicos de familia, pediatras y psiquiatras. «Es prácticamente imposible encontrar profesionales para sustituir bajas o periodos de descanso», lamenta la consejera.
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