María Jesús Montero hunde al PSOE, que firmaría su peor resultado en Andalucía tras el terremoto del caso Cerdán

El primer objetivo de Sánchez está cumplido de momento: nadie cuestiona el liderazgo de la ministra de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, aunque hay quienes no comparten su acumulación de cargos. El segundo propósito, que es recuperar la Junta —perdida en las elecciones de 2018—, se le está complicando a la ministra. Montero, que fue proclamada candidata a la Presidencia autonómica hace tres semanas, está cada día más lejos de la meta que se había marcado cuando aterrizó.

A la espera de que se abran las urnas –no tocan hasta la primavera de 2026–, las encuestas son un termómetro de la capacidad de movilización del voto. Y el sondeo del barómetro de junio de 2025, publicado este jueves por la Fundación Centro de Estudios Andaluces (Centra), dependiente de la Consejería de la Presidencia, muestra un preocupante enfriamiento de las expectativas de la política que estaba llamada a devolver a los socialistas al Gobierno andaluz.

Lejos de remontar, el PSOE andaluz se hunde más bajo el liderazgo de María Jesús Montero. La formación que estuvo casi 37 años seguidos gobernando Andalucía firmaría su peor resultado si hoy se celebraran elecciones. Según el sondeo del denominado CIS andaluz, el PSOE, que eligió en febrero pasado a la ministra como secretaria general, obtendría 4,3 puntos menos con respecto al porcentaje de sufragios conseguidos en los comicios de junio de 2022 y podría perder entre cuatro y seis de los actuales 30 escaños en el Parlamento andaluz que consiguió Espadas, hasta ahora su nivel de apoyo más bajo en las urnas.

El PSOE pasaría a tener el 19,8% de los votos, empeorando el resultado del barómetro del primer trimestre de 2025 (23%) que ni siquiera reflejaba el efecto espuma de champán que generan los candidatos que se estrenan.

El PP de Moreno aventajaría en 21,9 puntos al PSOE de Montero. Aunque cae en 1,4 puntos, el presidente andaluz no ve peligrar su mayoría absoluta y seguiría sin necesitar a Vox para gobernar. El Centra le concede una horquilla de 55 a 57 escaños (la Cámara tiene 109) y el 41,7% de los sufragios, frente al 43,1% y 58 diputados de la última cita electoral.

El estallido del caso Cerdán el pasado 12 de junio y las sacudidas que este escándalo de corrupción ha provocado en el Gobierno del que forma parte Montero explicarían en parte este sonoro batacazo. La encuesta, basada en 3.600 entrevistas telefónicas, se realizó entre los pasados 13 de junio y 1 de julio, es decir, se inició justo 24 horas después de hacerse público el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que destapó que el entonces secretario de Organización del PSOE se lucraba con mordidas de empresarios beneficiados con la adjudicación de obras públicas.

En medio de esta marejada que golpeó al PSOE y al Gobierno, la corrupción ha escalado hasta el primer lugar en la lista de preocupaciones de los andaluces, desbancando al paro y la sanidad. El 36% sitúa la «insatisfacción con la política, la desconfianza y la corrupción» como el mayor problema de España. Pero el barómetro lanza otro misil en la línea de flotación del discurso negacionista de Vox. Según el sondeo, el 85,4% de los andaluces cree que el cambio climático existe y le otorga un grado de importancia de 7 puntos en una escala de 0 a 10.

El resto de los partidos mejoran en su estimación de voto. Vox se mantiene como tercera fuerza en Andalucía y pasaría de los 14 escaños actuales a una horquilla de entre 16 y 18, de celebrarse hoy elecciones. PP y Vox sumarían hasta 75 diputados del Parlamento andaluz, mientras los partidos de izquierdas reunirían, como máximo, 38.

El PSOE se hunde, mientras el resto de la izquierda experimenta un crecimiento. La coalición Por Andalucía, que aglutina a Izquierda Unida, Podemos y Sumar, es la que más sube (2,3%) respecto a los anteriores comicios, cuando sacó el 7,7% de los votos y cinco escaños. El CIS andaluz le otorga entre 8 y 9 diputados (10%). Adelante Andalucía, el partido de José Ignacio García, también aumentaría sus expectativas de voto hasta el 6,2% y podría sumar un tercer escaño. Ahora tiene dos.