Cruce de reproches entre Santiago Abascal y el candidato del PSOE para la Alcaldía de Málaga

En el mismo mensaje, el líder de Vox señalaba que Vox quiere que los españoles los voten por sus propuestas. «No por desesperación ante el comportamiento de los progres y comunistas» , remarcó Abascal con ironía, que remató el tuit con una cara riéndose del vídeo del candidato socialista.

A esto contestó Daniel Pérez tachando a Vox enfrentar a los españoles. «¡Hola Santi! tu partido, de extrema derecha, es un ataque a los valores de nuestra Constitución , persiguen el enfrentamiento entre españoles y el odio, no es ninguna inocentada», escribió el socialista, antes de decir que en su formación defiende «con valentía la tolerancia, la igualdad y la libertad. Valores que hacen grande a España».

En un «spot» prelectoral, el candidato socialista, desde el salón de plenos de Málaga y con un ambiente de película de terror, llamó a «parar» a la formación de Abascal. En el vídeo había un inesperado visitante que trataba de entrar en la estancia y era el portavoz socialista en el pleno el que corría hacia la puerta para intentar bloquear la entrada. Pérez se ponía delante de las puertas, resistiendo al empuje de Vox, hasta que aparecía el lema:  «Ayúdame a parar a Vox» .

Daniel Pérez justificó esta campaña como una forma de «advertir» sobre la entrada de la «ultraderecha» en el Ayuntamiento de Málaga . El temor del socialista es que la formación de Santiago Abascal obtenga representación política en las próximas elecciones municipales del 26 de mayo de 2019. El mensaje original se difundió el 28 de diciembre en las redes sociales con el título de «esto no es una inocentada».

El vídeo se publicó el día después de que los 12 votos de Vox sirvieran para dar la Presidencia del Parlamento de Andalucía a Ciudadanos. Un sillón que había sido patrimonio del PSOE, pero que ha cambiado de manos en base a un pacto de PP, Ciudadanos y Vox, que suman mayoría en el arco parlamentario. Una coalición de derechas nunca vista hasta el momento y que evidenciaba la pérdida del poder socialista en Andalucía, que será desalojado de la Junta por primera vez que se instauró la democracia.