El plan del Gobierno para Doñana genera más dudas que apoyos

Interfresa, la Interprofesional de la Fresa de Andalucía, en representación directa de los productores y comercializadores del sector, prefiere no hacer ninguna valoración «hasta no analizar detalladamente el plan de actuaciones». Para los freseros hay mucho en juego, y no quieren aventurar opiniones hasta conocer exactamente en qué se van a traducir las intervenciones ni cómo afectarán a los regadíos.

El único alcalde presente, más allá de Rocío del Mar Castellano, regidora almonteña, fue el independiente Manuel Mora de Lucena del Puerto. «Para nosotros es un plan más porque estamos ya hartos de planes y tantas inversiones que luego no vemos, pero dudamos que se produzcan». Mora insiste en que «el plan reproduce inversiones de 2005 e incluso anteriores». Uno de los puntos que más crispa a los dirigentes locales es «la falta de consenso». Además, «a los que estamos de verdad en el territorio ni se nos ha consultado ni se ha contado con nosotros»

El único respaldo claro proviene del anfitrión del encuentro. El Ayuntamiento de Almonte aplaude la transferencia de tres hectómetros cúbicos de agua a Matalascañas procedentes de la ETAP del Tinto. Asimismo, el Ayuntamiento ha destacado la inversión de 29,3 millones de euros para la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Matalascañas. «Se trata de un pilar fundamental no solo en términos ambientales y de sostenibilidad, sino también en materia de turismo, ya que la ejecución de este proyecto permitirá la recuperación de la bandera azul en Matalascañas», ha explicado el concejal. Por último, desde el Ayuntamiento han reiterado la «necesidad» de trabajar «de forma conjunta» con todas las administraciones para «avanzar en el objetivo común y eje de la acción del actual equipo de gobierno que no es otro que la preservación y defensa de Doñana». No obstante, elude cualquier referencia a los regadíos.

Manuel Mora advierte que «la ministra dice que solo se van a ejecutar las obras comprometidas, por lo que la presa de Alcolea por ejemplo se queda fuera». Significa que «a corto plazo no vemos nada y además la ministra mostró su rechazo a la PNL» para regular la corona norte que plantea «corregir las deficiencias que ya tiene el plan». Con los grupos ecologistas «tenemos que sentarnos y hablar porque nos referimos a tierras que estuvieron en regadío desde 1938 a 2004 y que no aparecen dentro del plan por no salir en una foto». Mora ha invitado a la ministra «a visitar nuestro pueblo, que ponga cara a los agricultores, que conozca el terreno y no solo un papel». La solución de Doñana «es agua». Por ello «no buscamos ampliar sino conservar el regadío actual, por eso le pedimos que estudie la PNL caso a caso». Los primeros interesados en conservar Doñana y su imagen «somos nosotros mismos porque es nuestro medio de vida y su imagen. La marca Doñana es un referente de calidad, por lo que no puede ser que cada dos por tres tengamos problemas por referencias negativas de Doñana» Cada vez que sucede «las pérdidas son de dos millones y medio de euros diarios». La mala gestión de Doñana «no es culpa nuestra, sino del Gobierno central y la Junta de Andalucía, no de los agricultores».

El presidente del PP de Huelva, Manuel Andrés González, ha reprochado que la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, que venga a la provincia de Huelva «vender humo» sobre Doñana y «a no concretar nada». Así, ha añadido que «si la ministra Ribera lo que pretende es la protección de Doñana, que es lo que queremos todos, lo que tiene que buscar es el consenso, el diálogo que le ofrece la Junta».

Los ecologistas defienden las actuaciones planteadas por el Ministerio. Sin embargo, consideran que es «urgente» que la Junta, que ostenta las competencias sobre el Espacio Natural Protegido y la ordenación del territorio, «cierre las fincas de regadío ilegales y ejecute el Plan de la Fresa».

El secretario general de WWF, Juan Carlos del Olmo, ha valorado que Doñana está «en el momento más peligroso de su historia», ya que «su futuro depende de lo que hagamos ahora, no mañana». «Consideramos muy positivo que el Miteco haya acordado poner en marcha un plan de restauración hidrológica para Doñana que haga frente, además, al impacto del cambio climático y al saqueo del agua como venía demandando WWF».