Un proyecto europeo impulsa aerotaxis en un pasillo aéreo entre los aeropuertos de Málaga y Granada

De la lanzadera no hay noticias, pero Aeropuertos Nacionales (Aena) y Enaire, la empresa pública que gestiona la navegación aérea y el espacio aéreo en España, han hecho este martes 18 de noviembre una prueba alternativa que también puede ser interesante: un helicóptero ha unido los aeropuertos de Málaga-Costa del Sol y Federico García Lorca Granada-Jaén «para validar el modo de operación con el que volarían aerotaxis pilotados y drones de carga».

Se trata del proyecto OperA, que cuenta con financiación europea y que, según explican las dos empresas públicas, «busca demostrar que estas aeronaves pueden convivir con la aviación convencional garantizando el máximo nivel de seguridad operativa en entornos reales«.

El helicóptero ha hecho cuatro vuelos entre los mencionados aeródromos para probar los procedimientos que haría un aerotaxi pilotado o drones de carga autónomos en distintos tipos de espacio aéreo. Con esta demostración, se pretende dar el visto bueno el modo de operación para este tipo de vuelos, «que formarán parte del espacio aéreo en un futuro próximo».

Las pruebas buscan comprobar que las rutas diseñadas por Enaire y los procedimientos operativos «permiten que estas aeronaves, ya sean pilotadas, remotas o autónomas, puedan volar en espacio aéreo controlado y no controlado, puedan coexistir sin interferir con la actividad habitual de los aeropuertos y aeronaves convencionales, garantizando al mismo tiempo el máximo nivel de seguridad operativa para todos los usuarios del sistema aéreo«.

El proyecto de movilidad aérea avanzada OperA cuenta con una financiación total de aproximadamente 9,52 millones de euros y una contribución de la UE de cerca de 5,97 millones. Esta iniciativa europea de investigación e innovación en movilidad aérea avanzada busca validar nuevas operaciones de taxis aéreos pilotados y cargas no tripuladas.

«Representa un paso decisivo hacia la integración segura y eficiente de aeronaves eléctricas de despegue y aterrizaje vertical en todos los tipos de espacio aéreo, contribuyendo a la creación de un cielo digital europeo más sostenible y conectado«, recalcan los dos componentes del consorcio, que también cuenta con la participación de Crida, Eurocontrol y fabricantes como Pipistrel y Vertical Aerospace, entre otros.