La Pastoral Penitenciaria, una terapia para los internos de Córdoba

Precisamente esas terapias para discapacitados psíquicos representan una de las líneas que Rojas pone sobre la mesa a la hora de hacer balance de 2016 . Explica que dos internos han ido a diario al centro que Caipo tiene en Las Quemadas para desarrollar actividades entre las 09.00 y las 16.00 horas. «De no haber sido por la ayuda de la Diputación no habría sido posible», resume el director de esta Pastoral. Añade que «ha tenido un gran beneficio en la vida de estos internos ».

Reyes alude asimismo al abanico de posibilidades que les ofrece la furgoneta que les subvencionó la institución provincial. «Gracias a ella hemos podido visitar la Mezquita-Catedral, Medina Azahara, Montilla o Encinas Reales , por citar sólo algunos de los lugares a los que hemos viajado». También subraya las terapias con animales que los reclusos han recibido en el Campus de Rabanales . «Íbamos en grupos de cinco o seis y la verdad es que los resultados han sido sorprendentes», manifiesta el director de la Pastoral, al tiempo que indica que «esas terapias ayudan mucho a desarrollar la responsabilidad en las personas a través del trabajo con animales». «Cambios de comportamiento» es una de las frases que más repite el director del Secretariado de Pastoral Penitenciaria cada vez que se refiere a cualquiera de las acciones que efectúan con internos de la cárcel cordobesa.

En su balance no olvida tampoco la celebración de la Misa del Gallo , una eucaristía que tuvo lugar el pasado 24 de diciembre a las 17.00 horas y que ofició el propio obispo de Córdoba, Demetrio Fernández. «Nos juntamos más de 300 personas, lo que prueba que hay muchos creyentes en nuestra cárcel », afirma el director de la Pastoral, al frente de ella desde hace tres años y capellán de la cárcel desde hace 15.

La catequesis para internos es otra de las actuaciones que lleva a cabo la Pastoral Penitenciaria. Cerca de 200 personas, de los 15 módulos, reciben esta enseñanza un día a la semana de parte del cuerpo de voluntarios. «Estamos muy contentos por el trabajo y por la ayuda que recibimos», concluye Reyes.