Los turistas se dan de bruces con la realidad de los museos y monumentos municipales

« No es una buena imagen para una ciudad que pretende destacar en materia turística», han señalado a modo de resumen la mayoría de los visitantes contactados por este periódico, muchos de ellos catalanes que han venido hasta el sur a pasar los días festivos.

Los más previsores tienen todavía mañana una oportunidad , ya que muchos se marchan de nuevo a sus lugares de origen por la tarde, pero una parte importante se han quedado literalmente con la miel en los labios . «Yo pude ver el Alcázar otra vez que vine con un grupo en primavera, pero mi marido no lo conocía y es una auténtica pena», indica Iris Mengual, de Barcelona, en alusión a Pablo González, que se mentiene con las manos cruzadas a la espalda mirando la puerta de la fortaleza con gesto contrariado.

«Es que, además, no nos han informado en el hotel de la situación», se lamenta el hombre. Porque ésa es otra de las quejas habituales entre los visitantes: la falta de información al respecto, porque una cosa es lo que indican los folletos con una letra pequeña y otra bien distinta es una advertencia de viva voz. «Al menos, no perderías el tiempo tratando de ver lo imposible», comenta, por su parte Nuria Alonso, de Madrid.

Entre tanto, la situación parece ir para largo, porque según ha señalado, por su parte, el presidente del comité de empresa del Ayuntamiento de Córdoba, Juan Miguel Carvajal (CTA), «nadie se ha puesto en contacto con nosotros ni parecen tener prisa tras el cambio de responsable», que en este caso es David Luque.