Arranca la escolarización en Córdoba con los colegios en busca de un alumnado menguante

De cara al curso que viene, se pueden escolarizar —no es obligatorio— por primera vez los niños nacidos en 2019: en la provincia fueron 5.998, según el INE , si bien esa cifra ha variado en la actualidad por familias con hijos que hayan dejado nuestra tierra o hayan llegado a ella.

Esos casi 6.000 pequeños que cumplen, o ya lo han hecho, tres años en este 2022 y a los que la Junta ofrecerá una plaza son 211 menos que los nacidos en 2018 (-3,4%). La caída no es puntual. De 2015 a 2019 en todos los ejercicios descendió el número de pequeños que vinieron al mundo en Córdoba. Y en el lustro anterior también dominaron las caídas y sólo en dos años el número de nacimientos se mantuvo.

Para palpar el hundimiento en picado de la natalidad , baste reseñar un último dato. En lo que va de siglo, 2008 fue el ejercicio en el que más nuevos cordobeses vinieron al mundo: 8.679. En 2019, se contabilizaron 2.681 nacimientos menos (-30,9%).

Con estos indicadores, para los colegios, lograr alumnos es una asignatura complicada. Uno de los grandes escaparates que han tenido, cuando llegaban estas fechas, han sido las jornadas de puertas abiertas —los colegios admiten su importancia para captar escolares —, pero el Covid también las enfermó. En 2021, los centros las reinventaron, con encuentros ‘online’ o visitas físicas reducidas en número.

ABC ha consultado a seis centros de la capital (tres concertados de ideario católico y otros tantos públicos) para ver cómo ha evolucionado esta ventana abierta a que los padres les conozcan en este 2022, con una situación sanitaria mejor. Algunos recuperan las jornadas de puertas abiertas, aunque con todas las medidas de prevención ante el Covid , y otros siguen apostando por que las familias acudan en grupos muy reducidos.

Con el sistema implantado por el coronavirus en 2021 de visitas de grupos muy pequeños de padres, sigue el colegio concertado Maristas Cervantes . Su director, Javier Perea , explica que son «individualizadas o de máximo tres o cuatro familias». Mantienen ese modelo por ser «muy útil para los padres. Se sienten muy atendidos». Se hace «en horario lectivo. Enseñamos el colegio funcionando». Añade que en la prolongación de este sistema también influyó el Covid : «En enero, estábamos con una subida y preparábamos esto [el acceso de los padres de los pequeños] con incertidumbre».

«Los papás —explica— vienen interesados en el horario, las extraescolares o qué servicios tenemos». Esa información se les completa con otra de «largo plazo: cuál es nuestro proyecto educativo o nuestro ideario». Los progenitores «no preguntan mucho» por las medidas antiCovid , pues «esa información se la damos nosotros» y ellos las ven en el recorrido.

Defiende que estas iniciativas de puertas abiertas son «importantes» para captar alumnos. Pero, matiza, lo fundamental para lograr la confianza de los padres es «el trabajo del día a día». «Muchas familias que vienen a nosotros llegan a través de conocidos» que han tenido o tienen sus hijos allí, dice.

En el centro concertado Trinitarios, han apostado también de nuevo por las visitas muy reducidas, de máximo dos o tres familias, pero, señala su director, José Luis Obispo, el 18 de febrero , dentro de la celebración de los 50 años del colegio, sí realizaron una jornada de información. Vinieron padres con «niños de las guarderías cercanas» y se les organizó en grupos de cinco familias para conocer el centro.

Era «pronto», señala, para volver a las puertas abiertas clásicas, con un «gran grupo» de personas: «Estamos recién salidos de una sexta ola muy agresiva». En estos encuentros, el centro transmite que «somos un colegio religioso con ciertos valores. En lo académico, insistimos en la innovación pedagógica, sin quitar lo clásico». Añade que «muchos padres se interesan por los servicios, como comedor o aula matinal».

Y tratándose de los peques de la casa, también hay preguntas sobre «si hay periodo de adaptación o monitora de Infantil». Obispo rememora que en 2021 los progenitores preguntaron «muchísimo por las medidas antiCovid . Este año, lo hacen muchísimo menos». Señala que estos encuentros con las familias son «importantes», porque «conocernos puede animarlas» a que les confíen la educación de sus hijos.

Al acudir al colegio Calasancio, centro concertado, su directora, María Rosario Gracia , explica que ya han hecho sus jornadas de puertas abiertas, siguiendo los protocolos antiCovid . «Dado que las circunstancias sanitarias mejoraban, nos lanzamos a hacerlas presenciales en grupos reducidos», señala. Hicieron tres en febrero. «Quisimos adelantarlas» para evitar que el virus pudiera desbaratar su planificación.

En 2021 , hicieron tres sesiones ‘online’ y visitas personalizadas los sábados. Aunque «tuvimos muy buena respuesta», afirma que «el formato presencial nos gusta más a nosotros y a las familias». Pese a que sus días de puertas abiertas acabaron, «nos siguen llamando padres». Cuando se forme «un grupito», podrán ir al centro.

En estas reuniones con las familias, desde Calasancio se les informa de que «somos una escuela que humaniza, evangeliza e innova». Se les presenta igualmente «nuestro ideario y el proyecto educativo». Y las cuestiones que plantean los padres son «qué metodología usamos, cómo atendemos a las familias o qué servicios tenemos para los niños. Este año no han preguntado por medidas antiCovid ».

Gracia considera que este tipo de jornadas son «fundamentales» para captar alumnos. Permiten a las familias «poner cara y voz» al colegio y «pueden dirigirse a los profesores que atenderán a sus hijos. Una publicidad del colegio puede atraer, pero los padres quieren el contacto directo».

En los colegios públicos consultados, todos recuperan los días de puertas abiertas. La directora de l Tirso de Molina , Mari Carmen Guevara, señala que las harán el 1 y 7 de marzo. Las retoman en un escenario en el que «van disminuyendo las restricciones», argumenta. En 2021, el contacto con los padres fue «por teléfono y por la web hicimos una presentación. Pero no es lo mismo. Con el cara a cara, se gana mucho».

Estas sesiones se harán «con ventilación, distancia interpersonal o uso obligatorio de mascarilla». El formato clásico, dice Guevara, es «mejor para transmitir que somos un centro pequeñito, con una serie de ventajas». Trasladan a los progenitores «en qué incidimos para una enseñanza de calidad. También solventamos dudas del proceso de admisión».

Añade que «imagino que no preguntarán mucho por medidas antiCovid . Está todo muy normalizado». Con el alumnado menguando, esta directora da a este tipo de citas relevancia para «darnos a conocer. Los colegios públicos no tenemos para grandes campañas. No podemos hacer otra cosa». Matiza que en la decisión de los padres influyen «otras muchas cosas», como el «boca a boca» , a través de amigos y conocidos, sobre los centros.

Su homóloga en el colegio público Eduardo Lucena, María Ángeles Quero, también se felicita por recuperar los días de puertas abiertas. En 2021 , los hicieron ‘online’: «No tuvo la misma aceptación. No podíamos mostrarnos, aunque hicimos vídeo con lo que hacemos o las dependencias». «A los papás les gusta más» la forma clásica, añade.

El encuentro físico vuelve, pero con todas las medidas antiCovid, dicen en el centro. Realizaron uno el 23 de febrero y harán otro en marzo. Los padres, explica, lanzan las dudas de quien tiene niños de dos años: «Cómo son los servicios, si van solitos… Les explicamos y tranquilizamos. Y comunicamos nuestro concepto de educación. No es sólo académico, sino de reforzar los valores de los niños como personas».

Quero dice que los encuentros con los padres tienen «muchísima» importancia para captar alumnos: «Para nosotros, es primordial que nos conozcan en persona. En nuestra zona, cada vez se unen más centros a estas iniciativas».

Cierra la ruta el colegio público Concepción Arenal . Su director, Rafael Luque, apunta que en 2021 optaron por encuentros telemáticos. Pero, en 2022, al ver que la incidencia del coronavirus «ha bajado», «qué mejor manera hay que las jornadas de puertas abiertas para que los papás conozcan las instalaciones, nuestra metodología de trabajo o los servicios complementarios». La harán con todas las medidas antiCovid el 14 de marzo , partiendo las familias en dos grupos.

Señala que la «mayoría»de preguntas de los padres son de «servicios complementarios. Es muy importante que los centros públicos tenga una buena batería de ellos: aula matinal, comedor y extraescolares». Luque no cree que las dudas de las familias vayan al protocolo Covid: «Eso está pasando a segundo plano».

Comenta que «la natalidad ha bajado bastante, y más en Fátima [donde se ubica el Concepción Arenal ]». Por ello, cada año, estas reuniones con los padres «tienen más relevancia para nuestro centro a la hora de captar alumnos. Desde hace cinco años, todos los colegios debemos darnos a conocer». Y una vía para ello son los días de puertas abiertas, que sirven para que «se vea nuestro trabajo y las familias puedan decantarse por nuestro centro».