Inspectores de Salud detectan «graves deficiencias» en La Sacristía, abocada a una sanción por los montaditos de pringá

La Consejería de Salud y Consumo ha informado en una breve nota difundida por Whatsapp de esta circunstancia que se recoge en un informe del pasado día 10 de la Sección de Procedimiento de la Secretaría General Provincial de la Delegación Territorial de Salud de Córdoba. El primer análisis de las muestras de este alimento depararon la presencia de 'clostridium prefingens' en una concentración de 2,5x10⁵ unidades formadoras de colonia por gramo (elevada según los expertos) en el montadito de pringá.

Los inspectores consideran, según la Junta, que esas deficiencias «pueden suponer un peligro con posible riesgo para la salud, proponiendo la incoación de procedimiento sancionador si se estima oportuno».

«A la vista de esta documentación remitida por la Sección de Sanidad Alimentaria, la Sección de Procedimiento considera que esta documentación debe ser ampliada y detallada, al objeto de valorar todas las circunstancias del caso concreto, y con la mayor precisión posible», refleja en su nota la Junta. Esto es, recoger los hechos susceptibles de motivar la incoación del procedimiento sancionador, identificación de los sujetos responsables y todas las circunstancias relevantes. Ahora se está valorando el inicio del procedimiento sancionador.

Según la Ley de Salud Pública de Andalucía, aprobada en 2011, establece tres niveles de sanción. En el caso de infracciones leves, se pueden fijar en hasta 3.000 euros. Si se tipificara lo sucedido como una vulneración de la normativa grave -como se determina en este caso-, la horquilla iría entre los 3.001 y los 15.000. Por último, en el caso de que se determinará como muy grave, la multa se puede mover entre los 15.001 y los 600.000.

Hasta que no se termine la investigación abierta y si finalmente procede el expediente sancionador no se sabe si se aplicará alguna de estas sanciones, que en todo caso sería por la calificación de los inspectores de «grave» una sanción de entre 3.000 y 15.000 euros.

La familia de la mujer fallecida, sobre la que no se ha podido confirmar aún si hay relación directa entre la intoxiación y su deceso, manifestó a ABC hace unas semanas que seguiría estudiando el caso y siguiendo la investigación oficial antes de tomar ninguna decisión al respecto.