«Las acciones de la Guardia Civil son ilegales según el derecho internacional y son una pérdida de tiempo si están diseñadas para desafiar la incuestionable soberanía británica sobre las aguas territoriales británicas de Gibraltar. Cuanto antes se den cuenta de ello ... todas las partes del espectro político español, desde la izquierda a la derecha, mejor». Con estas palabras ha condenado, el ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, lo que asegura ha sido una nueva incursión de la Guardia Civil en lo que la colonia considera aguas de soberanía británicas, algo que España no reconoce.
El gobierno del Peñón ha condenado así que una patrullera del Instituto Armado ha navegado en la playa de la Zona Este en la tarde de este martes y ha puesto en peligro a los bañistas. «La presencia de una embarcación policial extranjera tan cerca de la costa de Gibraltar representó un peligro para los bañistas y otros usuarios de la playa», ha asegurado en un comunicado.
La incursión, ha añadido, es también una «afrenta y un desafío a la soberanía de las aguas territoriales británicas de Gibraltar. Sólo puede servir para socavar aún más la confianza en España y en sus cuerpos de seguridad, tras una serie de incidentes de este tipo en el mar a lo largo de varios meses».
El gobierno gibraltareño considera muy grave este último incidente y asegura que ya lo ha trasladado al Reino Unido. «La actuación de la patrullera española es totalmente inaceptable y los agentes que iban a bordo deberían saber que no deben permitirse un comportamiento tan provocador y peligroso», añade en la citada nota de prensa.
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