La juez Mercedes Alaya puede irse sin dejar las macrocausas

Una vez que las plazas salgan a concurso a final de mes o primeros de noviembre, debe pedirlo. Tiene por delante a cinco en el escalafón pero dos no se presentarán. Aún en el caso que lo hagan los otros tres, son cuatro plazas por lo que si no lo reclaman un juez de otra provincia, el puesto será suyo. La toma de posesión sería aproximadamente en enero.

Si en enero no ha finalizado las macrocausas que instruye puede pedir continuar por un tiempo en su juzgado y que le guarden la plaza. El artículo 319.2 de la Ley Orgánica del Poder Judicial permite a los jueces un aplazamiento de su toma de posesión si hay «causa justa». En este caso, la citada causa sería que quiere finalizar las diligencias que inició.

Para que el Consejo General del Poder Judicial le conceda el «cese diferido», debe, en primer lugar, pedirlo la juez. Luego el TSJA debe informar favorablemente y, finalmente, que la comisión permanente del CPGJ le de el visto bueno. Normalmente estos ceses se dan por seis meses pero son prorrogables.

En el CGPJ afirman que los ceses diferidos, es decir, que un juez acabe la instrucción antes de irse a nuevo destino, se da mucho. Hay precedentes como el caso de los trenes de Santiago o la Malaya. Sobre todo porque la macrocausa puede retrasarse más si un juez nuevo debe estudiarlo antes de empezar.