Inquietud entre las bases del PSOE: «Es la peor situación en 35 años»

En declarciones previas a la Comisión Permanente de la Ejecutiva Federal , en la que la dirección analiza los malos resultados de ayer, el eurodiputado ha señalado que ha llegado el momento de «arreglarlo», pero sin hacer «giros dramáticos» ni con «titulares impactantes» ni con un «socialismo de Twitter».

En pleno debate sobre el liderazgo de Alfredo Pérez Rubalcaba , ha dicho que hay que «movilizar» los mejores recursos y las mejores energías para «recuperar el prestigio de militar en el PSOE». «Tenemos que traer a los mejores», ha añadido. Se ha mostrado en contra de la dimisión de Rubalcaba: «No consiste en hacer giros dramáticos. Abogo por la luz larga, por el medio y el largo plazo».

El secretario general del Partido Socialista de Madrid, Tomás Gómez , cree que mañana será el momento de «reflexiones profundas y serias» porque habrá que hacer «cambios profundos» en el partido. Ante la insistencia de las preguntas acerca de si debe haber cambios en el partido, Gómez ha reiterado que él no va a adelantar nada porque si no, esta reflexión, que hay que hacerla en el ámbito del PSOE, no sería «profunda».

El secretario general del PSOE de Extremadura, Guillermo Fernández Vara , considera que el PSOE en estos momentos, «más que dimisiones», lo que necesita es «escuchar los mensajes de la gente».

Twitter ha sido escenario de las peticiones más drásticas -la exministra María Antonia Trujillo pidió la dimisión de Rubalcaba y el diputado Odón Elorza una «catarsis»- pero también de reflexiones más sosegadas, como la del secretario general del PSOE castellano-manchego, Emiliano García-Page: «Toda elección es una lección y es así como debemos entender todos los últimos resultado electorales, empezando por el PSOE».

La exministra Beatriz Corredor ve necesaria una «imprescindible verdadera, profunda, valiente y responsable jornada de reflexión». El exdiputado Elviro Aranda , por su parte, cree que los socialistas deberían «ser más conscientes del momento histórico» y mirarse menos «el ombligo», teniendo en cuenta que España está «más invertebrada que nunca» y «los que deberían advertir a los ciudadanos están en el regate corto».