El PSOE arrancará su Congreso Federal con una imagen de «unidad» entre Sánchez y sus barones

No se esperan grandes problemas para el presidente del Gobierno. No los tuvo ya en 2017, tras ganar las primarias. Pero en aquel momento se visibilizó que su corriente controlaría el partido mientras buena parte del aparato bajaba los brazos y se preparaba para pasar la factura en el futuro. Pero el acceso de Pedro Sánchez a La Moncloa en 2018 lo cambió todo. Anestesió cualquier conato de rebelión interna .

En el PSOE viven ahora momentos de tranquilidad interna en términos generales. Pese al batacazo de las elecciones madrileñas del pasado 4 de mayo, hay dos elementos que explican que este Congreso vaya a ser interpretado en términos de cierre de filas en torno a Sánchez. El primero la derrota de Susana Díaz en las primarias andaluzas ante Juan Espadas. Además de forma contundente. Orgánicamente se demostró que el desgaste de Sánchez puede existir en términos electorales, pero no dentro del partido. Y el segundo elemento es la remodelación del Gobierno, que en el partido consideran «clave» para apuntalar a Sánchez . Ya que el objetivo fue lanzar el mensaje de que las disputas del periodo 2016-2017 pasaban a un segundo plano.

El paso a la primera fila de figuras como Óscar López, Isabel Rodríguez o Pilar Alegría dan buena muestra de esa intención. Combinado con la salida de Carmen Calvo, José Luis Ábalos, Iván Redondo o Francisco Salazar, cada uno por circunstancias diversas, ha servido para que en el partido sea generalizada la interpretación de que Sánchez ha querido «coser» definitivamente el partido. A esa anhelada unidad le faltaban un par de elementos importantes: los barones críticos y Felipe González. Y eso se intentará solucionar en el próximo Congreso Federal.

Fuentes de Ferraz aseguran que en la primera jornada del Congreso, el presidente junto a los ministros del ala socialista se reunirán con los presidentes autonómicos y los secretarios generales de las distintas federaciones . Se tratará de una reunión ampliada del Consejo de Política Federal, órganos que reúne a los líderes territoriales del partido. Y que coordina desde 2017 el extremeño Guillermo Fernández Vara. Aunque su protagonismo durante estos cuatro años ha sido muy reducid o.

Un día más tarde, el sábado, será el turno de los ex secretarios generales socialistas José Luis Rodríguez Zapatero, Joaquín Almunia y Felipe González . La presencia de González se vende como la última muesca que faltaba para poder vender unidad. Fue el propio presidente el que contactó con ellos para invitarles personalmente al cónclave, según explican en Ferraz. Posteriormente Adriana Lastra con José Luis Rodríguez Zapatero y Santos Cerdán con Felipe González terminaron de encajar los detalles de su participación.

Para el último día se reserva la intervención final de Sánchez y la votación tanto de la ponencia marco y la puesta de largo de la nueva Ejecutiva que, como ya se ha venido apuntando, será de un tamaño más reducido respecto a la actual. Se apunta además a una renovación generacional y con más presencia de mujeres. Las grandes incógnitas son si Sánchez elegirá un portavoz de la dirección federal o si ese papel lo va a desempeñar la vicesecretaria general, Adriana Lastra , una vez ha abandonado la portavocía en el Congreso.