Un programa, seis reformas

La gran reforma pendiente en la que España se juega su futuro, con la vista puesta en abandonar la cola de los países occidentales con estudiantes peor preparados para afrontar su futuro, y énfasis especial en una nueva Formación Profesional.

Con medidas como la ya anunciada por Rajoy de responsabilizar, incluso ante los tribunales, a los gobernantes que demuestren su incapacidad para gestionar fondos públicos y mayor coordinación con las autonomías en materias como Sanidad y Educación.

Reforma profunda de la Administración Central En línea con las medidas emprendidas por los gobiernos autonómicos del PP para que la austeridad se transforme en eficiencia; no con recortes precipitados, sino con la buena gestión necesaria para ahorrar en cargos, puestos y empresas públicas innecesarios.

Para impedir que sean de nuevo las clases más desfavorecidas las que más paguen el precio de la crisis, con atención especial a garantizar el futuro de las pensiones y proteger a la familia.

Todo un reto después de la pérdida de imagen y solvencia de nuestro país fuera de nuestras fronteras en los últimos años, lo que perjudica a nuestra posición económica en general y a la de las empresas españolas en particular.