La Policía volverá a rastrear el entorno de Las Quemadillas
Los agentes «peinarán» de nuevo la gravera y las escombreras próximas a la parcela de los Bretón, así como el río
D. DELGADO / F. J. POYATO
Los trabajos de búsqueda en Las Quemadillas no finalizarán hoy, cuando se den por concluidos los sondeos que durante tres semanas se han llevado a cabo en la finca de los abuelos paternos de Ruth y José , los dos hermanos en ... paradero desconocido desde el pasado 8 de octubre.
La Policía volverá a rastrear el entorno de la propiedad, esto es, la gravera en ruinas que se encuentra próxima a la parcela (que los efectivos ya «peinaron» con perros en octubre), así como en escombreras cercanas y hasta debajo del puente de la autovía cercano al polígono, según pudo saber este periódico. Además, el río también será objeto de un nuevo rastreo exhaustivo . Se realizará con el uso de un sistema de onda, mediante el empleo de un sónar de barrido lateral que detecta objetos en el cauce.
El togado que instruye la causa, José Luis Rodríguez Lainz , está dispuesto a registrar palmo a palmo la zona que tan bien conoce el padre de los dos menores y principal sospechoso, José Bretón . Y es que el juez quiere agotar todas las posibilidades de que los pequeños se encuentran en algún lugar de este laberíntico enclave.
No obstante, esta línea de investigación no es la única sobre la que se centran las pesquisas policiales. Fuentes cercanas al caso apuntaron que los agentes «están trabajando sobre otras muchas hipótesis», además de cumplir con lo decretado por Lainz , esto es, la propia búsqueda en Las Quemadillas , así como las pruebas solicitadas por la acusación particular (entre las que se encuentra el interrogatorio a los hijos de Catalina, la hermana de Bretón ).
Pese a ello, la finca y su entorno centran todos los esfuerzos del operativo desplegado por una sencilla razón: todos los interrogantes se encuentran casi en su totalidad en la parcela y en sus zonas limítrofes.
Una técnica novedosa para extraer los datos del móvil de Bretón
Además, la pista de los niños parece perderse allí .Hay varios indicios que refuerzan esa conclusión. Por un lado, el móvil del progenitor le sitúa cuatro horas en su finca el sábado en que denuncia la desaparición. Además, el propio Bretón ha admitido en una de sus múltiples versiones que tras recoger a los niños de casa de sus abuelos, acabó en la parcela, donde quemó recuerdos de su matrimonio mientras sus hijos jugaban tras comer allí (primera versión) o dormían en su coche tras haber comido en casa de su madre (segunda).
A esto se suman los ruidos de tirar escombros a las 14.30 horas del 8 de octubre, las imprecisiones del geo-radar, la zona de tierra mojada hallada tras la casa grande, las «reformas» de las que Ruth Ortiz , la progenitora, habló a su madre que Bretón estaba haciendo o las fuertes dudas que existen aún sobre la permanencia en Las Quemadillas en solitario del padre hasta en una docena de ocasiones desde que se separa hasta que dijo perder a los críos.
El entorno de la parcela ya fue objeto de múltiples rastreos poco después de que los pequeños desaparecieran. Además de la casa de los abuelos y el terreno que la circunda, los efectivos buscaron en colectores próximos, alcantarillas, varias graveras y el río Guadalquivir. Para ello se valieron de unidades caninas y un geo-radar similar al que se ha utilizado en estas últimas semanas.
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