Moratinos se entrevistó ayer en secreto con Gadafi en Libia

Miguel Ángel Moratinos , según se supo hoy, sólo estuvo unas horas en la capital libia, las suficientes para entrevistarse con Gadafi, convencido de que cualquier posible acuerdo no será factible sin su visto bueno. El pasado 18 de febrero, Moratinos ya intentó conseguir un entendimiento entre Suiza y Libia, citando en Madrid a los ministros de Exteriores de esos dos países, Micheline Calmy-Rey, y Mousa Kousa.

El desplazamiento fue desvelado por la agencia libia de noticias y confirmado después por el departamento que dirige Moratinos, sin especificar muchos más deatlles. Según se informó a ABC en fuentes diplomáticas, el objetivo del ministro era ofrecer a Gadafi, en persona, una nueva propuesta, con la que se espera desbloquear el contencioso.

La crisis, que en un principio era libio-suiza, pero que luego ha salpicado a la Unión Europea, se abrió en julio de 2008, cuando la Policía de Ginebra detuvo en un hotel a Anibal Gadafi, uno de los hijos del líder de la revolución libia, y a su esposa Aline, acusados de ejercer la violencia sobre dos de sus empleados domésticos.

Tras una noche en prisión y el pago de una alta fianza, fueron puestos en libertad, pero Muammar el Gadafi no olvidó lo que consideró una humillación. Sólo cuatro días más tarde, eran detenidos en Libia dos hombres de negocios suizos por «infringir las leyes de extranjería».

Las gestiones de Suiza para que los dos empresarios fueran liberados no fructificaron y las autoridades suizas restringieron los visados a un centenar de personajes destacados libios, entre los que estaba el propio Gadafi para entrar en el espacio Schengen, del que forman parte la mayoría de países de la Unión Europea, junto Noruega, Islandia y la propia Suiza.

A su vez, Gadafi reaccionó con la suspensión de visados a esos países, con excepción de España, Italia y Malta.

Moratinos, además entregó a Gadafi un mensaje de Su Majestad el Rey, en el que habla de la fructífera cooperación y las relaciones amistosas entre España y Libia. Gadafi intentó recientemente hacer una escala en España, a su regreso de Venezuela, pero finalmente, al no tener garantizado que vería a Don Juan Carlos o al presidente del Gobierno, decidió suspender su plan.