La diputada que desbarató el consenso del Congreso sobre ETA «aplaudió» a los etarras de la T-4

Según reconoció en su día la ahora portavoz de Bildu en la Cámara Baja , lo hizo como «una expresión puntual de cariño» a los terroristas, que denunciaron malos tratos en su detención. Beitialarrangoitia negó luego ante el juez que tuviera intención de enaltecer a la banda terrorista ETA.

El PP también se opuso finalmente al texto negociado por los grupos sobre el final de ETA por ser «insuficiente», ya que ni se mencionaba el carácter terrorista de la banda, ni se explicitaba que su disolución debe ser «incondicional» ni se resalta que su cese decretado hace cinco años representa la «victoria de la democracia y el Estado de Derecho» frente a los violentos. Un parlamentario popular cabeceaba ayer, a la salida del hemiciclo, por la frustración de la simbólica iniciativa. «¿Pero cómo vamos a rebajarnos y a ceder en nuestras posiciones los demócratas para arrancar un consenso insuficiente con Bildu?», opinó.

En su defensa, la alcaldesa aseguró que no tenía previsto pedir ese aplauso «caluroso» para Portu y Sarasola cuando le llegó el turno de hablar en el acto de presentación de las candidaturas de Acción Nacionalista Vasca (ANV) en el polideportivo Anaitasuna de Pamplona (Navarra), el 12 de enero de 2008. Pero, dijo, actuó «guiada por el sentimiento» .

En el atentado de la T-4 de Barajas, el 30 de diciembre de 2006, murieron dos ciudadanos ecuatorianos, Carlos Alonso Palate y Diego Armando Estacio . «Les acusen de lo que les acusen no quita que se les tenga que dar un buen trato» a los etarras, insistió.

La Audiencia Nacional la condenó en 2009 a un año de prisión por exaltar a ETA, pero el Tribunal Supremo la absolvió de la acusación de «enaltecimiento del terrorismo».