Leguina: «La destitución de Carmona es un acto pornográfico de Ferraz»

-La decisión de Pedro Sánchez de apartar de la Portavocía municipal a Carmona ¿mejorará la delicada salud del socialismo madrileño?

-No se entiende por qué ese intervencionismo de Ferraz en Madrid. Y para empeorar las cosas. Lo que se ha hecho con Carmona no tiene nombre.

-¿Cree que se la tenían jurada tras apartar a su amigo Tomás Gómez de la dirección madrileña?

-Lo que sí sé es que durante la campaña electoral lo que se quiso es promocionar el tícket Gabilondo-Carmena. Y se tuvo éxito. A la vista está.

-Al margen del fondo de la decisión, ¿era el momento?

-Al señor que han crucificado ahora lo quieren echar cuando faltan pocos meses para las elecciones generales. Que no me digan que esto no podía haber esperado. Es absolutamente injustificado. Cualquier cosa que se quisiera hacer podía esperar.

-¿Es un mensaje de Ferraz a los díscolos de Madrid?

-Esto solo se puede entender en una visión cortoplacista. De puro poder interno. Está claro que quieren ser los enterradores del PSM. Y ya me dirá usted qué mérito tiene enterrar a un partido. Es un acto pornográfico.

-¿Se está actuando con esa contundencia en otras federaciones?

-A mí, o a cualquier socialista de mi generación, nos molesta lo que ha ocurrido aquí en Madrid, porque, mientras tanto, la dirección federal deja que en Valencia los socialistas hagan de su capa un sayo. En el socialismo madrileño no hay nada más que intrusismo por parte de la dirección.

-¿Le sorprende que por un lado se apoyen las primarias y que, sin embargo, se esté optando últimamente por apartar a los candidatos que emergen de ellas?

-Lo que están haciendo es saltarse los Estatutos y el artículo 6 de la Constitución. Proclaman las grandes ventajas de las primarias, en las que por cierto yo no creo, y resulta que en vez de respetar lo que defienden se las saltan y dan un golpe de mano.

-¿Tiene arreglo el PSM?

-Puede que esto se arregle cuando lleguen las elecciones generales. Y conozcamos el resultado. Ya se ha visto lo que hacen en la política británica los líderes cuando pierden.