Margallo promete que continuará la ayuda de España a Tacloban tras el tifón Haiyan

Cientos de miles de personas viven aún en tiendas de campaña habilitadas para acoger a quienes hace cinco meses perdieron las pocas posesiones que tenían a causa del tifón, que en Filipinas lleva el nombre de «Yolanda». Unas 6.000 personas murieron, cerca de 2.000 han sido dadas por desaparecidas y 14 millones sufrieron daños en sus posesiones. García-Margallo recordó que, desde España llegaron en los primeros días 179 personas formadas por la Agencia Española de Cooperación Internacional y para el Desarrollo ( Aecid ) y poco después 35 médicos para reforzar el hospital regional, que él mismo pudo visitar hoy.

España contribuyó con 700.000 euros al funcionamiento de ese centro hospitalario y pasadas un par de semanas, el equipo médico se retiró y se facilitaron 200.000 euros a Médicos del Mundo . En paralelo se pudieron en marcha los convenios con seis organizaciones no gubernamentales (Cruz Roja, Acción Contra el Hambre, Save the Children, Médicos sin Fronteras, Intermon Oxfam y Cáritas) por valor de dos millones de euros.

Igualmente, la cooperación español facilitó la primera planta potabilizadora, que se encontraban en una población relativamente cercana, y cinco grupos electrógenos, que permitieron el funcionamiento del hospital.

El ministro visitó también los almacenes del Programa Mundial de Alimentos, desde donde se atienden las necesidades de la población afectada, y al que España contribuye con 300.000 euros. El conjunto de la ayuda humanitaria española se elevó a unos 15 millones de euros.

Hoy, el ministro, que se reunió con el alcalde de Taclobán, Alfred Romuáldez, quien le habló de la intención de reconstruir la ciudad diez kilómetros hacia el interior, hizo también entrega de 25 barcas artesanales a pescadores que lo perdieron todo por el tifón, y que son las primeras de 4.000 que irán siendo entregadas.

García-Margallo subrayó ante los periodistas la labor realizada por la cooperación española para ayudar a los filipinos afectados y dijo que, a partir de ahora, «habrá que hacer un enorme esfuerzo para continuar la ayuda, pero, igual que se hizo durante la tragedia, lo haremos ahora, porque hay muchas necesidades, y esperamos la participación de entidades dispuestas a colaborar».

Una de las actuaciones que tiene en marcha la cooperación española es la ayuda a las autoridades filipinas para la puesta en marcha de una base logística en Clark de respuesta rápida ante las emergencias en Filipinas, que es el segundo país que más desastres naturales sufre.

Por la mañana, aún en Manila, el ministro visitó la Escuela Bangkal, en la que existe un programa muy intenso de enseñanza del español, como pudo comprobar el propio García-Margallo asistiendo a una clase con los alumnos de secundaria.