Rajoy regaló a Obama facsímiles de la biografía de Núñez de Balboa

Los mensajes optimistas se repetían en los corrillos: entre Rajoy y Obama ha habido buena sintonía. Quizás no han llegado al nivel de Aznar y Bush , pero las circunstancias, apuntaba, también son diferentes. Se ha consolidado una alianza que estaba dañada.

Unos pasos más allá, el presidente Rajoy compartía su satisfacción con todos. Acababa de imponer la Gran Cruz de la Orden Isabel la Católica al senador Robert Menéndez , por favorecer las relaciones de amistad y cooperación entre España y Estados Unidos, y por su generosa dedicación a la comunidad hispana. Un ejemplo de la buena relación entre los dos países, que vuelve a recuperarse después de años de distanciamiento por los desplantes de Zapatero .

La tensión había quedado atrás y Rajoy compartía su satisfacción con algunos empresarios españoles que han viajado a Washington, como Isidro Fainé o Juan Rosell , por el respaldo que ha obtenido de Obama a sus políticas económicas, eso sí, con la advertencia de que hay que seguir trabajando.

Durante la hora y cuarenta minutos que estuvieron reunidos en total, media hora más de lo previsto, incluidas las declaraciones públicas, Rajoy invitó a Obama a visitar nuestro país . El presidente de Estados Unidos aceptó encantado... si su agenda se lo permitía . En Moncloa son optimistas y creen que si emprende una gira europea hará parada en España.

Firma en la sala Roosevelt

Rajoy empezó con buen pie su visita a Washington al rendir homenaje al Soldado desconocido . Ya en la Casa Blanca, entró al Ala Oeste y firmó en el libro de honor de la Sala Roosevelt . Obama salió a recibirle a la puerta del Despacho Oval. No hubo intercambio de regalos, pues solo la parte española entregó algunos presentes: una biografía de Núñez de Balboa , una carta del explorador a Fernando el Católico y un mapa mundi, facsímiles de los originales de la Biblioteca Nacional. Eso sí, la delegación española se marchó con una cajita de caramelos de chocolate, con los colores de la bandera de Estados Unidos.

La reunión se abrió sin más preámbulos, y rápidamente empezaron a tratarse los temas de fondo, como los relacionados con la recuperación económica y la creación de empleo. Obama y Rajoy, que se comunicaron en todo momento mediante sus intérpretes y no improvisaron ni una palabra en la otra lengua, no tuvieron tiempo ni para pedir un café . Fue una reunión de trabajo puro y duro.