La AVT, sobre el chivatazo del Faisán: «Los hechos y su autoría han quedado probados»
En la última sesión del juicio, solicitan ocho años y medio para Pamiés y ocho años de prisión para Ballesteros por revelación de secretos y colaboración con banda armada
La AVT, sobre el chivatazo del Faisán: «Los hechos y su autoría han quedado probados»
En la última sesión final del juicio por el chivatazo a ETA en el bar Faisán, el abogado de la AVT, Antonio Guerrero , solicitó ocho años y medio años de cárcel para Enrique Pamiés y ocho años para José María Ballesteros ... por los delitos de revelación de secretos y colaboración con banda armada.
Respecto a este último delito, la AVT considera, a diferencia de la Fiscalía, que para colaborar con la organización terrorista «no hace falta compartir sus fines ideológicos».
«La información que se facilitó buscaba confundir la intervención policial y frustrar la incautación de un dinero que finalmente llega a la banda terrorista ETA. La participación de los dos policías es efectiva y relevante. Aunque no se compartan fines y objetivos y aunque no haya una ayuda a la banda, cuando la persona transmite este tipo de informaciones asume que está contribuyendo a una actividad delictiva», explicó.
Guerrero también descartó la posibilidad de enmarcar el chivatazo en un proceso de paz entre el Gobierno y ETA : «No es hasta el 29 de junio cuando el presidente del Gobierno anuncia la apertura de conversaciones con la banda y estos hechos se producen antes».
Hechos probados
Guerrero considera que en la vista oral han quedado probados los hechos objeto de acusación: el 4 de mayo se produjo el chivatazo, la llamada telefónica que recibe el propietario del bar Faisán Joseba Elosúa. Además, la defensa considera que esta probado el «móvil político» de la misma, « como relata Elosúa a su yerno , Carmelo luquini, en el trayecto que hicieron hacia Francia».
«Es palmario, es evidente, e incluso o no ha sido negada por las defensas la existencia de las llamadas. No ha habido por parte de las defensas negación de las llamadas, que está acreditada por las declaraciones testificales de Elosúa y de Carnelo Luquini y está acreditada también por la baliza del vehículo Ford Focus», aseguró.
Probados los hechos, continuó Antonio Guerrero, toca acreditar la autoría de los mismos: «No existe ninguna prueba directa, pero sí pruebas indiciarias que acreditan la participación de estas personas que están siendo juzgadas junto a otras que no están siendo juzgadas» , apuntó.
Finalmente, dijo que para pedir la condena de los acusados no se basa sólo en las conversaciones telefónicas, sino en que «los hechos han quedado comprobados» y la participación en ellos de los dos acusados: «Y me refiero también al señor Ballesteros, que también conocía a lo que iba al bar Faisán».
El pasado jueves, el fiscal Carlos Bautista expuso en el juicio sus conclusiones y mantuvo también sus penas . Les acusa de revelación de secretos, delito por el que pide 1 año y medio de cárcel para Pamies y 2 años para Ballesteros, y, alternativamente, de colaborar con ETA, por el que reclama 5 años de prisión para cada uno.
Noticias relacionadas
- El «caso Faisán», un ejemplo de la España de «Torrente»
- El dueño del bar Faisán: «El "txakurra" me dice que no cuente que me han llamado»
- Elosúa reconoce que lo avisaron por teléfono de la detención del recaudador de ETA
- Pamiés: «No me dieron la orden de dar el chivatazo y no lo hubiera permitido»
- Ballesteros niega que pasara la llamada del chivatazo a ETA en el bar Faisán
Ver comentarios