Juanma Moreno, sobre un pacto con Vox: «No se puede gobernar con quienes quieren cruzar tus líneas rojas»

«Si cualquiera que quiera pactar con el PP tiene un proyecto que va en contra de las líneas rojas que nos hemos marcado no es viable», ha asegurado durante el encuentro 'El desafío andaluz' organizado por el diario Sur en Málaga. Aunque sin referencia a partidos ni candidatos, ya el pasado lunes en Almería levantó una barrera : «No vamos a dar ni un paso atrás en materia de lucha contra la violencia de género, en materia de lucha contra el cambio climático ni de autonomía».

Según Moreno, la mayoría de andaluces quiere «diálogo y sensatez» en el escenario político y confía en el que el próximo 19 de junio esa «mayoría positiva» salga a la calle y considere a los populares como única opción.

Es precisamente ahí, en el trato cara a cara con el pueblo, donde el presidente asegura haber encontrado un «sentimiento de orgullo andaluz» y «autoestima creciente» sin precedentes en la región que le invitan a confiar en un buen resultado electoral .

«Percibo que el ciudadano sabe que tres años y medio no son suficientes para desplegar todas las medidas y que entienden que tenemos que tener una segunda oportunidad». Con ese mensaje pretende consolidar no solo los votos que se granjeó en los pasados comicios, sino tender la mano al electorado de izquierda a disgusto que ha cambiado de parecer tal y como revelan algunas encuestas y -según Moreno- las «sensaciones» que ha podido percibir en la calle.

Cuestionado sobre una posible abstención de Por Andalucía para evitar la entrada de Vox en el gobierno andaluz -algo que apuntó su candidata, Inmaculada Nieto-, el presidente ha sido tajante: «por la experiencia que tengo, a la izquierda a la hora de la verdad le tiemblan las piernas» . En este sentido, ha recordado como la oposición lastró «un presupuesto desideoligizado y pragmático» en una situación tan «difícil» como la salida de la pandemia, cuando la economía andaluza había caído a niveles cercanos a los de la Guerra Civil.

Esa falta de confianza es con la que Moreno quiere sustentar su proyecto. «Si hay un diputado más en los ocho partidos de la izquierda habrá un gobierno frankenstein que va a hacer lo contrario de lo que hemos hecho: subida de impuestos, revisionismo y parálisis», ha subrayado. Por el contrario, dice perseguir un «buen resultado» como el obtenido por Isabel Díaz Ayudo en Madrid, que le ha permitido «tener un gobierno monocolor que es muy importante en términos de eficiencia ».

En su lista de objetivos, ha situado en primer lugar ser la lista más votada, además de superar solo el PP andaluz en votos a toda la izquierda y acercarse al máximo a la mayoría absoluta. Solo esos tres logros le permitirían sacar adelante el resto de proyectos y medidas que han quedado en la recámara. Entre ellos, uno ambicioso, superar en PIB a una Cataluña abocada al suicidio en términos económicos.