El pesimismo se extiende entre los inversores por la inflación y la guerra de Ucrania

La percepción negativa e incertidumbre respecto a la evolución económica se refleja ya en este sentido, con el índice de la gestora en valores negativos durante el segundo trimestre de 2022 (-0,2) tras seis trimestres seguidos con valores positivos.

Desde el 'shock' que sufrió la bolsa en marzo como consecuencia de la invasión de Ucrania, la confianza en el mercado bursátil remontó ligeramente durante abril y mayo como efecto rebote. Sin embargo, desde que el índice alcanzó su máximo histórico en el segundo trimestre de 2021 como consecuencia de la extensión de las vacunas y la vuelta a la normalidad tras la pandemia, las perspectivos se han mermado progresivamente hasta situarse en negativo durante el segundo trimestre de 2021.

«La tendencia al pesimismo en la renta variable era clara desde el máximo histórico alcanzado por el índice hace justo un año», apunta Francisco Márquez de Prado, Sales Executive de J.P. Morgan Asset Management para España y Portugal.

Este cambio de paradigma se refleja en el descenso en la intención de inversión directa en bolsa respecto al primer trimestre del año, tanto en bolsa (-1,6 puntos), como en fondos de inversión (-1,5), planes de pensiones (-1,2) y activos inmobiliarios (-1,2).

Por otra parte, suben el atractivo de los depósitos y las libretas o cuentas de ahorro remuneradas en 2,4 puntos, aunque, respecto al año pasado, el número de personas que no invertirá nada en los próximos seis meses aumentó del 18 al 21% según la encuesta de J.P. Morgan. Además, el número de inversores que se declara pesimista con respecto a la evolución de las bolsas supone ya el 38% del total, 14 puntos más que hace seis meses y 20 puntos más que hace un año.

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En el caso de las inversiones a largo plazo para la jubilación, el índice indica que el 45% de los ahorradores e inversores españoles no se plantean dedicar esfuerzos añadidos para completar su futura jubilación. ello. Del 55% que sí lo hace, la mayoría se decanta por planes de pensiones privados, mientras que los fondos de inversión son la segunda opción más elegida, seguida de los planes de pensiones de empresa.