La factura de Cataluña en intereses de la deuda se disparará un 84% de aquí a tres años si no hay quita
Un informe de Fedea estima que la carga derivada del endeudamiento público se multiplicará por cuatro aún cumpliendo los objetivos de déficit
Los gobiernos regionales deberán destinar a financiar su deuda 9.000 millones de euros que hasta ahora se destinaban a otras política
El rescate de Cataluña le cuesta 1.000 millones al año al Estado
El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, y su consejera de Hacienda, Alicia Romero
ERC, por aquel entonces al frente del Gobierno de Cataluña, se preocupó mucho en noviembre de 2023 de condicionar su apoyo político a la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno al compromiso de que la Administración del Estado admitiera una quita de al menos 15.000 millones ... de euros en la deuda catalana en manos del Estado como consecuencia de los dispositivos que se activaron durante la crisis financiera para evitar el riesgo de quiebra de las administraciones territoriales. En aquel momento se planteó como una cuestión de justicia por la supuesta infrafinanciación que habría sufrido Cataluña durante los años en que esos dispositivos estuvieron vigentes.
Sin embargo, el motivo puede también tener que ver con las fenomenales cargas presupuestarias que la Generalitat de Cataluña tendrá que asumir vía presupuestos si no se produce una quita que reduzca el endeudamiento actual de la administración catalana. Un informe publicado este lunes por Fedea sobre la previsible evolución de la carga de intereses de las comunidades autónomas entre 2022 y 2027 -en un contexto de normalización de los tipos de interés frente al escenario que siguió al 'whatever it takes' de Mario Draghi- revela que el coste del servicio de la deuda para los presupuestos de Cataluña se incrementará un 84% de aquí a tres años de no aprobarse la quita de deuda comprometida.
Traducido a euros esto significa que a la altura de 2027 los presupuestos catalanes tendrían que reservar cerca de 3.000 millones de euros (2.957 millones de euros) para devolver los intereses generados a los compradores de títulos de deuda catalana, privados o públicos, en este caso el Estado español, cuando este ejercicio está previsto destinar a este efecto 1.604 millones de euros y hace solo dos años esa cuenta apenas suponía 1.000 millones.
Y eso en el caso de que Cataluña cumpla a rajatabla los objetivos de déficit marcados por el Gobierno para alcanzar los objetivos de consolidación fiscal que Bruselas marca a España por la entrada en vigor de las nuevas reglas fiscales. El informe de Fedea ya subraya que sus estimaciones se basan en ese escenario optimista y que el montante podría elevarse en caso de que el déficit fuera mayor y la evolución de la deuda pública menos favorable que lo esperado.
«A la vista de nuestros resultados, consideramos que las comunidades autónomas deben calibrar con mucha prudencia todas las políticas fiscales expansivas que ahora y en los años venideros pueden desarrollar. Como todas las administraciones, han de ser conscientes de que embarcarse en reducciones significativas de impuestos y proyectos de gasto de dudosa rentabilidad social, puede dañar la sostenibilidad de sus finanzas«, señala el informe de Fedea. »Además, dado el elevado déficit estructural de las comunidades autónomas es prioritaria la puesta en marcha de una estrategia fiscal creíble a medio plazo que garantice la sostenibilidad de las cuentas públicas«, remacha.
Un hachazo a las cuentas de las autonomías
Pese a que fueron las fuerzas políticas catalanas las que lograron arrancar al PSOE el compromiso de una quita de deuda y que será Cataluña, a la luz de los datos de Fedea, la que tendrá que asumir cuantitativamente una mayor carga por la subida de la factura por intereses, hay otros gobiernos autonómicos que afrontan un panorama bastante más complicado.
Según Fedea, serás las autonomías que se han beneficiado de los mecanismos de protección del Estado y no han salido a los mercados las que experimentarán un incremento mayor de su carga de intereses.
Regiones ya muy endeudadas como la Comunidad Valenciana, la Región de Murcia o Andalucía verán crecer hasta duplicarse la carga de intereses prevista para este año en los siguientes tres ejercicios con impactos presupuestarios que en el caso de la Comunidad Valenciana rondarán los 1.000 millones, que serán de 667 millones en Andalucía y de 208 millones de euros en Murcia.
Desde que se iniciara la normalización de los tipos de interés en 2022 y hasta 2027 será La Rioja la que experimentara un mayor crecimiento de la carga de intereses hasta el punto de que esta cuenta se le multiplicará por ocho.