Sam Bankman-Fried, fundador de la plataforma de criptomonedas FTX: «Nunca intenté cometer fraude»
El ex CEO de esta 'exchange' asegura que en las Bahamas solo tiene una única tarjeta de crédito con una deuda de 100.000 dólares
Los tribunales estadounidenses estiman que la plataforma debe unos 3.100 millones de dólares a sus 50 principales inversores
Fin del adanismo digital
En la crisis que esta sacudiendo el mundo crypto, ya hay nombres propios que brillan con luz propia y serán imprescindibles para explicar las actuales turbulencias cuando tengamos más perspectiva. El de Sam Bankham - Fried se ha hecho hueco por méritos propios. El fundador ... y exmáximo responsable del 'exchange' FTX ha afirmado en una entrevista publicada esta madrugada por el 'The New York Times' y recogida por la BBC que «nunca intenté cometer fraude» y negó que tuviera dinero al margen de su actividad en esta compañía dedicada al comercio de criptomonedas.
A preguntas sobre su relación con las Bahamas ha asegurado que solo tiene una única tarjeta de crédito con una deuda de unos 100.000 dólares. Preguntado sobre los movimientos de dinero en FTX y otras entidades, algunas de propiedad del propio Bankham como Alameda Research, ha dado detalles parciales. En este sentido, ha defendido que la compañía había consentido inversiones en firmas que llamaban la atención por sus proyectos medioambientales para publicidad.
En cualquier caso, el fundador de FTX ha admitido que subestimó la cantidad necesaria para cubrir las retiradas de los clientes en este tipo de exchange. Se da la circunstancia de que Bankman ha sido considerado en varias ocasiones como la versión millennial del mítico Warren Buffet y, a finales de octubre, sus ganancias estaban estimadas en más de 1.500 millones de dólares.
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FTX se declaró en quiebra hace a principios de noviembre y Bankman-Fried dimitió como CEO el 11 de noviembre. Los tribunales han determinado que FTX debe a sus primeros 50 grandes clientes casi 3.100 millones de dólares. En cualquier caso, Bankman ha añadido que no le preocupa un potencial proceso penal y civil. «Es un momento para pensar sobre mi mismo y mi propio futuro», ha apuntado durante su conversación con 'The New York Times' . En cualquier caso, ha defendido la veracidad de sus respuestas aunque sin aportar ningún material probatorio sobre la solvencia de FTX y la posibilidad de hacer frente a las peticiones de sus inversores.
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