El Banco de Canadá baja los tipos en 25 puntos básicos y marca el camino a sus homólogos del G7

El organismo dirigido por Tiff Macklem no solo se ha mostrado confiado en que la inflación está encaminada hacia el objetivo de estabilidad de precios del 2%, sino que, además, ha asegurado que es «razonable» que se acometan más ajustes a la baja si la convergencia continúa.

«Con más y más pruebas de que la inflación subyacente está relajándose, la política monetaria ya no necesita ser tan restrictiva. En otras palabras, conviene bajar nuestro tipo de interés oficial», ha sostenido el gobernador Macklem.

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En cualquier caso, el banco central ha puntualizado que los recortes futuros estarán condicionados a unos progresos del lado de la inflación que se anticipa que sean «probablemente poco uniformes». «Si bajamos los tipos [...] demasiado deprisa, podríamos poner en peligro los avances realizados», ha resumido Macklem.

En este sentido, el canadiense ha apuntado a las tensiones geopolíticas, a un repunte en los precios de la vivienda y a un crecimiento de los salarios por encima de la productividad como riesgos que podrían comprometer las decisiones de política monetaria.