Alemania detecta nuevos dispositivos «inadmisibles» en motores diésel

El documento de varias páginas y fechado a principios de julio ha sido publicado ahora por BR y Der Spiegel. Sus términos no son para nada amistosos: la KBA amenaza incluso con el desmantelamiento obligatorio de vehículos. El texto describe detalladamente tres dispositivos de desactivación que han sido detectados a lo largo de las investigaciones del software de control del motor de un Mercedes Clase E 350 Blue TEC con motor Euro 6 (OM642).

En una de las estrategias descritas, el dispositivo interfiere en el sistema de depuración de gases de escape de un vehículo diésel, que sólo funciona en un rango de temperatura exterior. Estas llamadas «ventanas térmicas» fueron declaradas inadmisibles por el Tribunal de Justicia Europeo el año pasado.

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Aparte de esta estrategia, dependiendo de las condiciones del aire acondicionado, el sistema inyecta diferentes cantidades de una solución de urea en el sistema de purificación de gases de escape. La autoridad también hace apreciaciones muy críticas sobre el sistema que garantiza la eficacia del catalizador SCR, que depende de la temperatura en el proceso de purificación de los gases de escape.

Como consecuencia, anuncia el inicio de un examen más amplio sobre el que estudiará una «prohibición de operación», es decir, el desmantelamiento de los vehículos. Por el momento, la KBA ha ordenado a Mercedes-Benz que «reduzca el número de vehículos producidos [...] en los que se han utilizado las estrategias enumeradas» y aclara que «el proceso involucra un modelo que se ha establecido en un medio voluntario de actualización de software por Parte del fabricante desde 2019».

Mercedes-Benz, por su parte, ha solicitado con éxito una extensión del plazo para presentar explicaciones al respecto y en las próximas semanas enviará documentación sobre los dispositivos cuestionados, tanto a la KBA como al Ministerio Federal de Transporte.

«Estamos cooperando plenamente», dice un portavoz de Mercedes que resta importancia al asunto, «hemos estado en contacto con la KBA en muchas ocasiones por muchas preguntas y apreciaciones», agrega. Pero según las organizaciones medioambientales podría no tratarse de un caso aislado.

Un análisis de la asociación de investigación ambiental ICCT prueba que muchos automóviles diésel en Europa siguen aportando emisiones de escape demasiado altas. Ayuda Ambiental Alemana (DUH) confirma la evaluación de KBA y mantiene que, desde hace varios años, existe «una manipulación ilegal del software de escape».

Además de este caso, el jefe de DUH, Jürgen Resch, está pidiendo al Ministerio Federal de Transporte que publique todas las mediciones y documentos de gases de escape en «dispositivos de desactivación determinados oficialmente» para que «finalmente los casi diez millones de propietarios de vehículos diésel en Alemania puedan ser ayudados a hacer valer sus derechos».