Así son los 'Agro-millennials': mejor formados, satisfechos con su profesión y de centro-derecha
El campo español necesita un mínimo de 200.000 nuevas incorporaciones para asegurar el relevo generacional
6 de cada 10 agricultores se jubilarán en esta década y apenas unas 27.000 explotaciones tienen como titulares am menores de 35 años
Luis Pérez dirige junto a su hermano de 37 años una premiada quesería en Cantabria
«Estamos en tiempo de descuento", advierte Luis Pérez sobre la falta de relevo generacional en el campo español. Este joven ganadero, de 31 años, regenta junto a su hermano de 37 años una quesería con 400 ovejas de leche situada en Cantabria desde ... 2018. «Necesitamos la incorporación de jóvenes: Si alguien tiene el deseo de dedicarse a esta actividad ,no hay dejarlo pasar, venga o no venga de una tradición familiar», apunta. Desde COAG y la Escuela Técnica Superior Ingeniería Agronómica y de Montes (Etisam) de la Universidad de Córdoba han estimado que el campo español necesita un mínimo de 200.000 nuevas incorporaciones para garantizar que la antorcha se transmite a la siguiente generación. Porque, como han venido insistiendo desde las principales organizaciones agrarias y el propio ministro de Agricultura Luis Planas, 6 de cada 10 agricultores se jubilarán en esta década.
De momento, estamos lejos de ganar este partido. Según COAG, solo hay 27.000 titulares de explotaciones agrarias menores de 35 años por más de 355.000 que tienen como titulares a mayores de 64 años, un 40% del total. En este contexto, junto a la Universidad de Córdoba, esta organización agraria ha presentado este martes el estudio 'Agro-millennials. Perfil de los nuevos agricultores/as y ganaderos/as del siglo XXI' basada en entrevistas a varias decenas a este colectivo. En el mismo se dibuja un perfil de los agricultores más jóvenes: mejor formados que las generaciones anteriores, satisfechos con su profesión y con una visión ideológica encuadrada en el centro-derecha.
Con Bachiller y, más de un tercio, universitarios
Sobre la formación, el informe arroja que un 65% tienen como mínimo finalizado el Bachillerato o una Formación Profesional (FP) superior (en el último informe de la OCDE esta proporción caía hasta el 48,7% los jóvenes españoles en general) y un 38% tiene un título universitario. Tampoco ocultan el orgullo por lo que hacen y puntúan en un 8,48 sobre 10 su nivel de satisfacción y un 69% vería con buenos ojos que sus hijos se dedicarán a la misma actividad. Además un 83% de los encuestados se muestra convencido de que la agricultura es un trabajo estable a largo plazo.
Una curiosidad, el 'agro-millennial' apuesta por Instagram como su red social preferida (62%), seguida de Facebook (59%) y Twitter (25%). Su aplicación favorital, la de la mayoría de la población: Whatsapp que usan 9 de cada 10.
Lo que sí está claro es que todavía pesa la tradición familiar a la hora de dedicarse al campo (un 66% de los participantes citan esta razón). Le sigue la convicción personal de contribuir a la producción de alimentos más sostenibles (31%) y la oportunidad laboral (25%). «Hay que romper con esto porque necesitamos a muchos jóvenes que vengan a instalarse en el medio rural a establecer una pequeña granja o un cultivo hortícola, a crear valor«, comenta Luis quien sostiene que acercar alimentos al mesa de otras personas es »una profesión muy digna«. Al respecto, lamenta que en muchas partes de la sociedad agricultores y ganaderos todavía no tienen el reconocimiento que cree que merece su actividad.
En esta línea, los 'agro - millennials' echan de menos más servicios como centros de salud y colegios (67%), lamentan que no se hayan mejorado en materia de medios de transporte para comunicar estas pequeñas localidades (64%) y todavía constatan día a día la brecha digital que separa la ciudad del campo (51%).
«Para formarme en materia de quesos estuve en los laboratorios de diferentes queserías por España y Francia. Además de estudiar sobre transformación industrial en una escuela agraria francesa especializada«, comenta este ganadero cántabro. Los nuevos agricultores también coinciden en que necesitan una mayor oferta formativa en materias como la gestión empresarial y el emprendimiento (69%). Además de en otras materas como la digitalización, citada por el 48% de los encuestados, y estrategias de comercialización (44%). Luis menciona su interés por estar al día en cuestiones como las analíticas practicadas a las ovejas y la fabricación de quesos.
¿Y cuál es su visión del mundo? El estudio resalta que ideológicamente, el joven agricultor, se encuadra dentro del centro derecha con una puntuación de 5,9 donde el '0' se identifica como la extrema izquierda y el '10' es la extrema derecha.
Obstáculos: la burocracia y el acceso a la tierra
Respecto a las barreras a las que tienen que enfrentarse el estudio señala dos principalmente: la burocracia, que cita el 69% de los encuestados, y el acceso a la tierra (43%). También es citado el largo periodo para la solicitud y concesión de la ayuda para la incorporación a la actividad (41%), así como la falta de reconocimiento social (24%). «Los planes de incorporación se han quedado obsoletos y no son realizados teniendo en cuenta la voz de los jóvenes», comenta Luis. A él le ha tocado pasear papeles de unas administraciones a otras.
«Montamos la quesería en 2018 y estuvimos dos años de burocracia hasta obtener todos los permisos«, recuerda sobre la carrera de obstáculos que jóvenes productores deben sortear y en la que, añade, un problema más: los problemas en el funcionamiento de la Cadena Alimentaria, donde todavía muchos sectores perciben unos precios de origen irrisorios. A lo que tampoco ayuda la actual 'tormenta perfecta' de escalada de los costes de producción (electricidad, combustible, plásticos, ...) junto a las consecuencias de la sequía y las novedades de la nueva Política Agraria Común (PAC), más exigente y 'verde' . «Tenemos que ser rentables», avisa Luis Pérez sobre una generación que tiene que ir tomando el relevo en el campo para desarrollar sus propias innovaciones.