Semana clave para la polémica patente única europea que ignora al castellano

Los ministros de Industria ratifican hoy el proyecto, justo el día antes de que el Tribunal de Justicia de la UE falle sobre el recurso de España e Italia y la Eurocámara vote su aplicación

10/12/2012
Actualizado a las 03:54h.

Horas decisivas para conocer el desenlace de la batalla legal y política que los gobiernos de Madrid y Roma han planteado contra la patente única europea por discriminar al castellano y al italiano. El Tribunal de Justicia de la UE (TUE) se pronunciará ... mañana sobre este controvertido asunto. El abogado general del TUE responderá a los recursos presentados por España e Italia, que se han autoexcluido de la patente porque sólo se tramitará en inglés, francés y alemán.

La opinión del abogado general -que no es vinculante pero que el Tribunal ratifica en el 80% de los casos- l lega la misma semana en la que los Gobiernos y la Eurocámara tienen previsto ratificar tras más de una década de negociaciones el acuerdo final para poner en marcha la patente única. Si el fallo es favorable a Madrid y Roma, este compromiso sería inválido.

«Creemos que las normas (para crear la patente única) son jurídicamente sólidas, han sido verificadas por todos los abogados que han participado en las negociaciones», ha dicho el portavoz de Mercado Interior, Stefaan de Rynck , al ser preguntado por si teme que el abogado general declara ilegal el acuerdo. «Esperamos que Italia y España se unan también a este régimen de patentes en el futuro», ha dicho el portavoz, que ha recordado que la protección se podrá solicitar en cualquier lengua de la UE, aunque sólo se tramite en francés, inglés y alemán.

Ahorro de un 80%

La patente única, cuyo objetivo es reducir en un 80% los costes para los innovadores, se ha puesto en marcha a través de un procedimiento de «cooperación reforzada» para sortear el veto de Madrid y Roma. Los dos países decidieron no sumarse a la patente y recurrieron el acuerdo a 25 ante el Tribunal de Justicia. La última pieza para crear la patente única se colocó el pasado 19 de noviembre con la elección de París como sede del nuevo Tribunal Europeo de Patentes, que además contará con salas especializadas en Londres (productos químicos y fármacos) y Munich (ingeniería mecánica).

Los ministros de Industria de la UE ratificarán este compromiso hoy por la tarde y el pleno de la Eurocámara votará el mismo mañana. Si no hay nuevos tropiezos, la primera patente europea podría concederse en 2014, según las estimaciones de Bruselas. Según los cálculos del Ejecutivo comunitario, el coste de la patente única se reducirá de los actuales 32.000 euros que cuesta ahora para 27 países hasta 2.500 para 25 países en el periodo transitorio y 680 euros al final del proceso.