El Gobierno británico nacionalizará parcialmente cuatro de los grandes bancos

La medida es especialmente urgente en el caso del Royal Bank of Scotland (RBS) y en el de Halifax Bank of Scotland (HBOS), en los que el Estado podría llegar a controlar un 50% y un 70% del capital, respectivamente, según aseguraba ayer «The Sunday Times». También se cuenta con una nacionalización parcial, posiblemente en menor escala, de Lloyds TSB y Barclays.

Se trata de cuatro de los cinco grandes del sistema bancario británico (el mayor banco, el HBSC, no se ha visto perjudicado por la crisis en la misma medida). Su cotización en Bolsa podría ser suspendida para que el impacto de la medida pueda ser digerido por el mercado.

De acuerdo con las negociaciones que los bancos mantenían anoche con el Tesoro británico, el RBS ha cifrado su necesidad en 18.900 millones de euros, lo que de ser aportados completamente por el Estado llevaría al control público del banco. El HBOS ha pedido 12.600 millones; 8.800 el Lloyds y 3.700 el Barclays. El Banco de Inglaterra les ha aconsejado que soliciten una cantidad mayor de la que necesitan, pues así podrán reforzar mejor su posición.

Limitar el sueldo de ejecutivos

Todo ello forma parte del plan de rescate de 500.000 millones de libras (630.000 millones de euros) anunciado la semana pasada, que incluye 50.000 millones para la capitalización de bancos, cifra que podría aumentar a 75.000. Entre los requisitos que se impondrán a los bancos beneficiados estará limitar el sueldo de los altos ejecutivos y la reanudación del normal préstamo a individuos y pequeños negocios.

Los detalles de los específicos acuerdos con cada entidad podrían contemplar que los bancos primero recurrieran a sus principales accionistas para obtener el capital requerido, y el Estado compraría los títulos que no fueran cubiertos. Debido a que las entidades ya acudieron a sus accionistas en los últimos meses para una refinanciación, se cuenta con que el Estado será el gran comprador.

Si en un principio el Gobierno indicó que se limitaría a adquirir acciones preferenciales, que no dan derecho a voto en los consejos de administración, ahora ya se habla de acciones normales cuya compra darán un control parcial o definitivo de la dirección de los bancos afectados.

Consecuencia de la operación será la marcha del consejero delegado del RBS, Fred Goodwin, y su sustitución por Stephen Hester, anterior jefe de finanzas del Abbey y que en la actualidad es consejero delegado de British Land.

La suspensión de la cotización en Bolsa también podría servir para que la pactada compra del HBOS por parte del Lloyds TSB se ajuste más a los menores precios actuales del primero de esos bancos.

Además de la inyección directa de capital, el plan de rescate británico también incluye doblar la cantidad destinada a liquidez, que pasará a 200.000 millones de libras, y dedicar 250.000 millones a la garantía de préstamos bancarios.