Pastor mediará para amortiguar el ERE en Iberia

La ministra de Fomento, Ana Pastor, que ayer se encontraba en Arteixo (La Coruña) para participar en un acto en la sede de Inditex, avanzó que el martes celebrará una reunión con los responsables de la empresa para «analizar» conjuntamente el bautizado como «plan de transformación» de Iberia , que incluye un ERE sobre una cuarta parte de la plantilla -4.500 empleados- y una reducción salarial de entre el 25% y el 35%.

En línea con las declaraciones de la titular de Empleo, Pastor apelará a los mecanismos de flexibilidad interna disponibles tras la última reforma laboral -la reducción de jornadas o la movilidad geográfica, por ejemplo- con el propósito de «matizar» la cifra final de trabajadores afectados, según fuentes del Ejecutivo.

Frente al clima de crispación entre empresa y sindicatos, que el viernes escenificaron su frontal oposición al programa presentado por los directivos , la ministra reclama diálogo, teniendo en cuenta que el aéreo es un sector vital para los intereses estratégicos del país. Pastor señaló que considera «muy importante» que exista «negociación y entendimiento» entre las partes. El plan «debe ser integral» y «no unilateral ni afectar solo a las personas» , reclamó. Una nueva petición -aunque no tan directa como la anterior- de delicadeza en la elaboración del que, con seguridad, se convertirá en el mayor ERE desde el último cambio en la legislación laboral.

El papel no será sencillo para ninguno de los dos representantes del Ejecutivo (el secretario de Estado de Infraestructuras, Rafael Catalá, acompañará a Pastor en la cita). La decisión final pertenece a una empresa -privada, conviene recordar- que ya mostró su rechazo a dar marcha atrás. « Nosotros tenemos sensibilidad y flexibilidad para aplicar el plan, pero sobre todo lo que tenemos es que buscar una solución que haga la compañía viable , que tenga futuro, y eso es lo que estamos persiguiendo en este momento», subrayó el viernes el consejero delegado de la compañía, Rafael Sánchez-Lozano, preguntado sobre las declaraciones de Báñez en una conferencia telefónica con periodistas.

No es la primera vez que el Gobierno interviene en el conflicto de Iberia. El pasado mes de mayo tuvo que aprobar un proceso de arbitraje para poner fin a la oleada de huelgas que convocaron los pilotos a comienzos de año. Posteriormente, la compañía (así como, su filial Iberia Express) impugnaron el laudo de obligado cumplimiento. El texto hoy permanece en suspenso, después de que la Audiencia Nacional ordenase repetirlo.